Valor de marca e innovación en la privada para fidelizar a los sanitarios

Crear una marca con unos valores de pertenencia de grupo, unido a la capacidad para innovar, crecer y generar nuevos modelos asistenciales para adaptarse a los cambios sociales, que, son, en última instancia, los que también afectan a los propios profesionales de la salud. Se trata de las principales ‘armas’ con la que cuenta la sanidad privada para hacer frente al nuevo paradigma generacional y, así, dar respuesta a las necesidades de médicos y enfermeros de cara a paliar los problemas de déficit asistencial que actualmente sufre el Sistema Nacional de Salud (SNS) mediante una doble vía: el impulso de la digitalización y la incorporación de los jóvenes profesionales a los órganos de gobernanza.

Así se puso de manifiesto en el debate Cómo aportar valor al trabajo de los profesionales sanitarios en España que, organizado por Redacción Médica con la colaboración de Vithas, acogió el plató de este periódico. David Baulenas Parellada, director corporativo de Asistencia, Calidad, Docencia e Innovación de Vithas; Elisabet Tort Sacasa, directora de Enfermería del Grupo Echevarne; Luis Medicuti Sabater, secretario general de la Alianza por la Sanidad Privada Española (ASPE); y Pilar Oncins Fanning, directora corporativa de Personas de Vithas, se sentaron en la mesa de diálogo de este medio.

Elisabet Tort Sacasa, directora de Enfermería del Grupo Echevarne.

Falta de profesionales sanitarios: ¿realidad o leyenda?

En los últimos tiempos, distintas voces han lamentado el déficit de profesionales sanitarios que viene arrastrando el SNS, sobre todo en especialidades como Familiar y Comunitaria. Sin embargo, para los expertos convocados por Redacción Médica, el abordaje del problema es mucho más complejo.

Mendicuti recordó que, en 2020, una encuesta elaborada por ASPE reveló que el 90 por ciento de los hospitales privados estaba “en búsqueda activa de profesionales de Enfermería”, si bien matizó que el estudio se hizo en “un contexto pandémico en el que los cuidados eran muy importantes y el 58 por ciento de los hospitales estaban en búsqueda activa de profesionales médicos de determinadas especialidades”.

“En Cataluña el ratio de enfermeras por 1.000 habitantes es de seis, cuando el promedio en Europa está en nueve. Y, si te vas a Noruega, que es la excelencia, están en 16 o 17 desde la crisis de 2008”, destacó Tort, para quien el problema se agrava por la falta de plazas para estudiar profesiones sanitarias. “Tenemos una problemática de entrada del personal de Enfermería en las universidades y tenemos una visión a corto medio plazo de muchas jubilaciones. Hay una generación de sanitarios que se jubila y la generación que viene es insuficiente para cubrir lo que hay”, añadió.

David Baulenas Parellada, director corporativo de Asistencia, Calidad, Docencia e Innovación de Vithas.

No obstante, Baulenas apuntó que ese déficit tan sólo se da actualmente en la Enfermería, no en la Medicina, aunque las dificultades para reemplazar a medio plazo los puestos que se queden vacantes por jubilaciones es común. “En los próximos tres años se van a jubilar unos 60.000 médicos. Hoy más del 25 por ciento tiene más de 65 años”, afirmó. A ellos, según Oncins, habrá que sumar otros 18.000 profesionales que pedirán certificados de excepcionalidad.

Para Mendicuti, por tanto, el “principal desafío” al que se enfrenta hoy en día el SNS también es la “falta de profesionales”, aunque ello no se limita a “una cuestión de número de trabajadores”. El secretario general de ASPE habló de la necesidad de articular una mejor planificación a largo plazo por parte del Ministerio de Sanidad, pero también de impulsar iniciativas más inmediatas: “Hay muchas, muchas herramientas para poder aumentar la masa de profesionales disponibles en un corto espacio de tiempo. Estamos hablando de la homologación de títulos universitarios, que debe ser rigurosa, pero debe ser también ágil administrativamente hablando, o por ejemplo, de herramientas de especialización de profesionales médicos, como se está valorando y como se está proponiendo desde el Ministerio de Sanidad, para que en un corto espacio de tiempo el sistema sanitario se pueda amoldar a las necesidades puntuales en cuestión de dos o tres años y no tener que esperar a 11 años como como se espera actualmente”.

Pilar Oncins Fanning, directora corporativa de Personas de Vithas.

Pérdida vocacional de los nuevos profesionales sanitarios

Para Tort, la profesión sanitaria se ha acabado convirtiendo en “poco atractiva” para las nuevas generaciones. Oncins apuntó, en primer lugar, al argumento económico: “Traer médicos de Latinoamérica a España a ciudades como puede Madrid o Barcelona es complicado. Tenemos la ventaja de que compartimos lengua, pero cuando la persona ya habla inglés y otros idiomas, las condiciones en otras ciudades europeas son más beneficiosas para ellos. Frente al sueldo sanitario en España, Alemania está pagando en Enfermería 5.000 euros al mes, o Reino Unido, que anualmente paga 20.000 euros más de lo que se está pagando en España de media”.

Según Baulenas, otro aspecto fundamental al respecto es el agravamiento de problemas de salud mental entre los profesionales sanitarios a raíz de la pandemia de coronavirus. “Yo creo que quedó indiscutiblemente demostrada la profesionalidad y el compromiso de los de los profesionales sanitarios, sin ninguna duda, con un feedback social muy positivo en un momento en que casi casi se generaron unas expectativas de cambio para ellos. Pero, después de los aplausos, después de ver que se había se había dado todo, que se había puesto en valor la profesión sanitaria, en estos momentos yo creo que esto se ha deshinchado”, afirmó.

Luis Mendicuti Sabater, secretario general de la Alianza por la Sanidad Privada Española (ASPE).

Cambio generacional en el ámbito de la salud

La saturación del sistema público, que acaba repercutiendo en el privado y aumentando excesivamente la carga de trabajo de los profesionales sanitarios, lleva a agudizar según Tort, esa desafección hacia la profesión, también vinculada a un cambio generacional: “La generación que ahora tiene que hacer de médicos y enfermeras tiene unos valores muy diferentes a los de hace unos años, y eso se nota en muchas cosas. Quizá el sistema se ha quedado con los horarios, con los sueldos y con las dinámicas antiguas”.

Frente a ello, según Oncins, es necesario aceptar un cambio en el paradigma de la profesión sanitaria. “Nos hemos apoyado durante muchísimos años en la vocación. Los sanitarios tenían que sacrificar sus vidas para atendernos. Yo creo que ahora es el momento en el que las organizaciones tienen que entender que hay generaciones distintas que buscan una recompensa a su esfuerzo”.

En este sentido, rescató una frase de Sócrates: “Los jóvenes de hoy aman el lujo, tienen malos modales, desprecian la autoridad, muestran de respeto hacia los mayores y prefieren chismear en lugar de ejercitarse”. “Nuestros padres pensaban eso de nosotros. Nosotros pensamos eso de nuestros hijos y nuestros hijos los pensarán de los siguientes. Yo creo que la responsabilidad de las instituciones también es amoldarse a las necesidades de los nuevos profesionales y crecer conjuntamente. La vocación no tiene que ir asociada a sacrificio, sino que tiene que estar vinculada a esfuerzo, pero también al reconocimiento”, aseguró.

Elisabet Tort sigue una de las intervenciones de David Baulenas durante el debate.

Para ello, Baulenas abogó por seguir dando más voz a los nuevos profesionales en los órganos de gobernanza, algo que desde Vithas ya se hace desde antes de la pandemia, tal y como resaltó: “A los que tenemos algo más de edad nos cuesta entender los valores, las necesidades y la visión de los jóvenes, y tenemos que hacer ese esfuerzo e integrarlos en la construcción de este cambio de paradigma. Y yo diría que hay que lo mismo a con valentía política”.

“Si las personas se sienten parte de esas decisiones, las fomentan más”, añadió Oncins, para quien ‘reinventar’ el sistema de salud sobre esos pilares pasa por articular una estrategia conjunta entre la entre sanidad privada, la sanidad pública, las instituciones y las universidades: “Creo que España se merece un futuro, un gran futuro en el sector, y en el ámbito sanitario merece estar al nivel de otras ciudades europeas y otros países del mundo. Y creo que la solución solo pasa por hacer los cambios conjuntamente”.

Pilar Oncins expone uno de sus argumentos mientras Luis Mendicuti espera su turno.

Digitalización para eliminar burocracia y ‘proteger’ la vocación

Por otro lado, Tort lamentó el aumento de la carga de trabajo de los profesionales con responsabilidades más ligadas al aspecto administrativo que al asistencial. Es decir, tareas “de poco valor añadido”, según Baulenas. Para solucionar ese aspecto, Oncins resaltó las posibilidades que hoy en día ofrece la tecnología para optimizar el trabajo sanitario. Al respecto destacó el proyecto Vithas One. “Es nuestro gran proyecto estratégico de transformación digital de la compañía, ya ejecutado en más de la mitad de nuestra red de 20 hospitales y 37 centros médicos. Unifica todos los procesos de registro y gestión asistenciales y no asistenciales; automatiza tareas burocráticas para liberar tiempo a nuestros médicos para centrarse en su actividad asistencial, investigadora o docente; facilita el trabajo en red de nuestros especialistas como establece nuestro modelo de institutos; abre la puerta a la telemedicina, desde las vídeo consultas, hasta las cirugías robóticas en remoto; y pone en manos de nuestros pacientes una relación más sencilla, en cualquier momento y lugar, con sus hospitales de referencia”.

En el aprovechamiento de esa oportunidad tecnológica coincidió Mendicuti. “No podemos sólo quejarnos de que no hay profesionales suficientes. Nosotros tenemos que tomar medidas para para poder hacer frente a este reto. Tenemos que ser más eficientes y necesitar menos profesionales con ayuda de la tecnología. Y también tenemos que saber adaptarnos a las nuevas generaciones, a los nuevos profesionales que demandan no solo remuneración, sino también conciliación. Entre todos, pública y privada, creo que conseguiremos abordar este este gran desafío”.

Ventajas de la sanidad privada respecto a la pública

En cualquier caso, para Baulenas, la sanidad privada parte con ventaja respecto a la pública a la hora de ofrecer este tipo de soluciones que hagan el trabajo sanitario más atractivo para las nuevas generaciones: “La capacidad de innovar, la capacidad de crecer, la capacidad de hacer cosas diferentes y la capacidad de poder generar modelos marca la diferencia en estos momentos”.

“Nuestro trabajo es crear una marca con unos valores. Yo creo que para una persona ha de ser un orgullo trabajar en un sitio donde la cuidan, donde participa y donde puede crecer. Yo creo que es nuestra arma principal, sentenció Tort.

Debate sobre los desafíos del trabajo de los profesionales sanitarios en el plató de Redacción Médica.