Ilustración de seguros de vida.


27 feb. 2024 16:25H
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Qué es un seguro de vida


Un seguro de vida es un contrato que se realiza entre una entidad financiera o aseguradora y un sujeto por el que se paga una prima a los beneficiarios en caso de muerte o incapacidad permanente del tomador. Con este tipo de seguro se pretende dar continuidad a la calidad de vida tanto del contratante como la de sus familiares en los casos en los que estos hechos tan graves sucedan.

Una de las coberturas que ofrece un seguro de vida es cubrir las deudas y gastos que tuviera la persona que contrato el seguro antes del fallecimiento o incapacidad permanente. Contar con este tipo de seguros proporciona mucha tranquilidad tanto al tomador como a las personas que lo rodean.

A la hora de elegir un seguro de vida es muy importante analizar las posibilidades que existen en el mercado. DKV ofrece unas condiciones únicas realmente interesantes para los que quieran conseguir una buena cobertura.


Qué cubre un seguro de vida


La cobertura ofrecida en los contratos de seguro de vida suele ser la siguiente:

  • Percepción del capital establecido por el asegurado. En caso de fallecimiento serán los familiares y para la incapacidad sobrevenida que impida trabajar será el propio tomador. También se puede adelantar un porcentaje del capital en caso de enfermedad terminal.
  • Asistencia durante el duelo. En caso de fallecimiento se ofrecerá ayuda para las gestiones necesarias tras la defunción.
  • Asistencia psicológica. Para los familiares del fallecido que lo necesiten. También se ofrece en caso de enfermedad grave o incapacidad permanente.
  • Otras coberturas opcionales. Dependiendo de la compañía aseguradora se pueden encontrar otras coberturas que se pueden añadir. Por ejemplo, se puede optar por recibir el doble (o el triple) del capital en los casos en los que el fallecimiento o invalidez sobrevenga por un accidente.
Los seguros de vida también cuentan con servicios adicionales como asesoría jurídica, segunda opinión médica, orientación médica, tratamientos de salud o elaboración de testamento.


Quién puede contratar un seguro de vida


Según la normativa española, cualquier persona mayor de edad puede contratar un seguro de vida. Si el beneficiario es una persona distinta de la que se quiere asegurar será necesario con el consentimiento expreso por escrito del asegurado.

Normalmente las personas mayores de 60 años suelen tener más dificultades a la hora de contratar un seguro de vida ya que la edad es uno de los factores de riesgo que se tienen en cuenta a la hora de realizar la evaluación por la aseguradora.

Otro factor para tener en cuenta es si el sujeto realiza algún tipo de actividad de riesgo ya sea dentro o fuera de su ámbito laboral. La compañía también deberá analizar si está dispuesta a asumir ese riesgo y cuál será el coste de la prima en el caso de que así lo haga.

La salud del asegurado es otro de los aspectos que se tienen en cuenta a la hora de contratar un seguro de vida. Por eso se solicita al sujeto que rellene un cuestionario donde responda preguntas sobre su estado de salud. También, en algunos casos, se puede requerir la realización de un reconocimiento médico si la aseguradora así lo estima conveniente para evaluar el riesgo.

Por qué contratar un seguro de vida


La principal razón es conseguir la tranquilidad de que la estabilidad económica familiar no se verá afectada en caso de un suceso tan grave como un fallecimiento, una enfermedad grave o una incapacidad permanente. Normalmente los seguros de vida se suelen contratar en los casos en los que se realizan operaciones económicas de cierta relevancia como las hipotecas.
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