Rafael Cofiño y Yolanda Díaz.
Si bien asumen las dificultades que se presentan para encajar las
37,5 horas en el ámbito de la sanidad privada, en el grupo de
Sumar en el Congreso hay ambición por abordar este debate en el corto o medio plazo. “Hay que tener en cuenta que hay sectores, como el de los médicos, que tienen
particularidades, pero sí creemos en que sea posible hacerlo”, resumen voces autorizadas del partido, que avanzan que su plan de reducción de jornada habría que desplegarse “en varias fases”.
El debate sobre la implantación de la
jornada de 37,5 horas en la sanidad aumenta conforme avanzan las negociaciones entre el Ministerio de Trabajo de
Yolanda Díaz, los agentes sociales y la patronal. Por el momento, eso sí, la idea no cala entre las empresas de salud, que apuntan a posibles “contratiempos” para que sus plantillas, ya “deficitarias”, puedan atender a un alto volumen de pacientes.
Consultados al respecto por
Redacción Médica, desde el grupo parlamentario de Sumar en el Congreso de los Diputados asumen esa problemática, aunque rechazan que las especificidades de la sanidad impidan amoldar la jornada. “
Vamos a buscar cómo encajarlo, creo que se puede hacer”, aseguran estas fuentes, que, en cualquier caso, subrayan que el plan de Trabajo tendría que constar de
“varias fases", de forma que este modelo comenzara a implantarse en los sectores con mayor viabilidad.
En este sentido, los progresistas apuntan a que para poder “encajar” las 37,5 horas en la sanidad privada primero habría que estudiar los efectos que ello tendría sobre los turnos e incluso las guardias (de hecho, el primer objetivo es que la jornada se sitúe en las 38,5 horas en el medio plazo).
Dudas sobre las 37,5 horas ‘flexibles’ en sanidad
No es la primera vez que desde Sumar se sugiere la idea de
‘flexibilizar’ el modelo para facilitar su implantación en la sanidad privada, aunque diferentes asociaciones de profesionales y empresariales exigen al Gobierno que acompañe esta medida de más incentivos frente a la
escasez de profesionales.
"Primero hay que abordar la gran escasez de profesionales, que es el gran problema porque no hay recursos para contratar a más; que nos expliquen cómo hacerlo", apuntan.
Otro obstáculo al que se refieren desde Sumar no es otro que el de las
negociaciones con las patronales, aunque también en este apartado se muestran optimistas. Los contactos, recuerdan las fuentes consultadas por
Redacción Médica, acaban de retomarse, y el Ministerio de Trabajo ha flexibilizado sus pretensiones en sus plazos de implementación.
Control de los excesos de jornada
Uno de los debates que más han tensionado los contactos entre el Ministerio y la CEOE (la Confederación Española de Organizaciones Empresariales) es el relativo al
control de la jornada por el que apuesta el departamento de Díaz.
Tal y como informó este periódico, Trabajo aboga también por disponer de un mayor control, a través de una
inspección remota, sobre los abusos horarios en el ámbito de la sanidad y otros sectores con ‘jornadas especiales’. Fuentes del Ministerio avanzaron que ello exigiría la creación de un
“registro específico” de jornada.
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