Mónica Rodríguez, directora de docencia del Hospital Vall d’Hebron y especialista en Medicina Interna.
No es casualidad que el
Hospital Vall d’Hebron haya sido el centro elegido por el primer residente que ha escogido especializarse en
Oncología, en el primer día hábil tras la
adjudicación de plazas MIR. El hospital catalán es desde hace tiempo
referente a nivel nacional e internacional en la especialidad, gracias a que “se aborda toda la patología oncológica, no solo desde el punto de vista asistencial, sino que también a
nivel de investigación. Además, en este Servicio es donde se descubren los
avances en este terreno, por lo que es una oportunidad única para hacer una inmersión en investigación”.
La plaza número 23 fue la primera que decidió sumergirse durante los próximos años en la especialidad de Oncología y
Mónica Rodríguez, directora de docencia del
Vall d’Hebron, muestra su satisfacción en
Redacción Médica tras “haber recibido de
forma tan precoz la
primera plaza MIR de la especialidad de Oncología. Esto es el reflejo de la importancia que el hospital da a la docencia, contando con cerca de
170 plazas acreditadas”. La especialista en Medicina Interna relata que dentro de la Oncología “se ha trabajado mucho en los últimos años para que la formación especializada dé respuesta a las necesidades reales de la sociedad actual”.
El Servicio de Oncología del Hospital Vall d’Hebron cuenta con una gran notoriedad y para Rodríguez esta fama es debido a que “es una
referencia clara a nivel nacional e internacional. Se aborda toda la patología oncológica en el hospital, no solo desde el
punto de vista asistencial, sino que la
investigación es
pionera a nivel mundial en cualquier tipo de avance en el ámbito oncológico”. Todos estos ingredientes provocan que el Servicio sea “absolutamente ejemplar a la hora de formar residentes”.
"El Servicio de Oncología es pionero a nivel mundial en cualquier tipo de avance en el ámbito tecnológico"
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Otro de los puntos fuertes del
Servicio dirigido por Josep Tabernero es, según la directora de docencia, que los residentes descubrirán “los avances del día a día en el terreno de la investigación, realizando una
inmersión completa desde las fases más tempranas, tocando desde la investigación más básica hasta la más avanzada”.
Los MIR experimentarán una "revolución en la Oncología"
En referencia al nivel asistencial y docente, Rodríguez pone de manifiesto que los residentes que decidan dedicarse a la Oncología en el centro catalán “estarán en contacto con todo el
abanico de la patología oncológica y experimentarán una auténtica revolución en la especialdiad con las nuevas terapias que van surgiendo”. Para la internista, el hospital catalán es uno de las principales instituciones “que tira adelante y que abandera el progreso en el ámbito de la terapia oncológica. Para un residente, formarse en este contexto es un auténtico privilegio, y esta es la razón fundamental de que
las primeras plazas MIR de Oncología escojan el Vall d’Hebrón.
"Para un residente, formarse en el contexto que ofrece el hospital catalán es un auténtico privilegio"
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Tal y como certifica Rodríguez, una de las principales reglas inamovibles del Hospital Vall d’Hebron es poner el máximo esfuerzo para lograr “
una docencia innovadora, férrea y llena de valor. Este mensaje ha llegado a los residentes, ya que el hospital lleva intentando comunicar esta forma de enseñar durante los meses previos a la
adjudicación de la plaza, trabajando para resaltar los puntos fuertes”. La especialista defiende que siempre vale la pena apostar por la docencia, ya que “es un motor de cambio para que la asistencia dé soporte a las necesidades de la sociedad actual”.
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