Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad.
El
Consejo de Ministros aprobaba esta semana la financiación de 1.548 plazas del
grado de Medicina para el presente curso académico, que requerirá un esfuerzo económico cercano a los 23 millones de euros.
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad, asegura que esta decisión tiene su base en el informe de
oferta-necesidad de especialistas 2023-35, que establece como posible solución a la falta de facultativos un incremento del numerus clausus en las universidades públicas. El objetivo, afirma el dirigente progresista, es que España se convierta en el décimo país de la OCDE (la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico)
con más graduados de Medicina en base a la población.
Padilla se ha referido en redes sociales al reciente acuerdo del Gobierno para
“aumentar el número de médicos graduados” y garantizar así “el acceso adecuado a la
Formación Sanitaria Especializada” frente al déficit de profesionales en ciertas disciplinas. El movimiento del Gobierno, pese a todo, fue cuestionado por algunas voces de autoridad del ámbito académico, como la de
Pablo Lara, presidente de la Confederación Nacional de Decanos de Medicina: “Las plazas de acceso no han dejado de aumentar y ello
no ha supuesto una disminución en ese déficit de especialistas, especialmente en Atención Primaria”, declaró a
Redacción Médica.
Antoni Trilla, decano de la facultad de Medicina de Barcelona, coincidió en que
el aumento de plazas puede no tener “mucho impacto real”. “Habrá que ver cuántos alumnos acaban entrando este año por encima de los del curso pasado", alegó.
A este respecto, Padilla ha reconocido este sábado que “han salido algunas manifestaciones diciendo que no es necesario y que vamos sobrados”. “Así que aprovecho para hacer algunas consideraciones”, ha comenzado el secretario de Estado de Sanidad, que ha concedido que España tiene más facultativos por mil habitantes que la media de su entorno, así como muchas más facultades de Medicina, y que se encuentra “al nivel o un poco por debajo en graduados”.
"La importación de médicos supone un drenaje profesionales cualificados para sus países de origen"
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"Yo soy de la opinión de que
faltan profesionales en algunos sitios pero que, en términos globales, tenemos un número de médicos por mil habitantes razonable y superior a la media de UE y OCDE, siendo el principal problema una mala distribución de cargas de trabajo y unas condiciones de trabajo muy mejorables”, ha añadido. No obstante, Padilla destaca que, a nivel de grado, “no bastan las
disquisiciones que se hagan sobre la situación actual en 2024”, sino que hay que “basarse en
prospectivas a 10-15 años”.
Visión "a largo plazo" para planificar las plantillas médicas
En este sentido, sostiene que el citado
informe de oferta-necesidad de especialistas dice que el “horizonte final”, ubicado en 2025, es “útil para decisiones cuyas consecuencias se materializarán a más largo plazo, como el numerus clausus de Medicina”.
Añade, en esta línea, que “una de las propuestas a corto plazo emanadas del informe de 2022 fue
aumentar el numerus clausus de Medicina en las universidades públicas”.
El estudio del Ministerio de Sanidad recoge además que la decisión de
“formar o importar” médicos formulada en el anterior informe, de 2022, “sigue presente”, aunque incide en que el aumento de numerus clausus en Medicina “
no debería necesariamente consolidarse, sino que se necesita flexibilidad para aumentar pero también para reducir plazas de acuerdo con las previsiones de necesidad”.
Tal y como ha destacado Padilla, en la actualidad España es el país número 14 de la Unión Europea y el 18 de la OCDE en graduados de Medicina ajustado por población, “de modo que el incremento del 15 por ciento en centros públicos, caeteris paribus y cumpliéndose en su totalidad (aunque subraya que esto “no es así, porque no todas las universidades se acogen a ello”),
se pasaría al número 10 de la OCDE”.
“A esto hay que añadir que mantener constantes las plazas de grado en la pública mientras las
universidades privadas florecen con el beneplácito de ciertos gobiernos autonómicos”, continúa el mandatario, “supone no solo un
elemento de inequidad en el acceso sino también el refuerzo de un cuerpo de futuros profesionales con un filtro de acceso por renta que puede influir en una representatividad poblacional deseable al hablar de los médicos y las médicas”.
Dos vías para aumentar el número de médicos
En este escenario, Padilla indica que para incrementar el número futuro de profesionales “se pueden hacer dos cosas”, bien aumentar las plazas grado o bien
incrementar la importación de profesionales. “Lo primero es menos inmediato y elástico a la baja”, reconoce, pero incentivar la llegada de talento extranjero “supone un drenaje de profesionales cualificados” para sus países de procedencia.
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