Tomás Toranzo, presidente de CESM; y Rafael Reig, secretario general de Acción Sindical de Satse.
Tras el fracaso de la última reunión del
Ámbito de la Negociación, los sindicatos elaborarán a contrarreloj una propuesta conjunta de
modificación del Estatuto Marco con una premisa inamovible: que desaparezca de la normativa el concepto de
eventual. Pero, al margen de ello, las centrales defenderán una serie de propuestas que van desde la erradicación del periodo de prueba en las profesiones sanitarias a la necesidad de que los interinos cobren los trienios.
En palabras de
Tomás Toranzo, presidente de la
Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), esta última demanda obedece a un mero “imperativo legal”, pues los organismos europeos ya se han posicionado al respecto y los demandantes “están cobrando los trienios tras ganar las sentencias”. La otra ‘pata’ de su propuesta se refiere al hecho de que se mantenga el periodo de prueba en las profesiones sanitarias, algo que bajo su punto de vista “no tiene ningún fundamento”.
No obstante, la base de las reivindicaciones de CESM, Satse y el resto de sindicatos apuntan a la
alta temporalidad en el Sistema Nacional de Salud (SNS). El propio Toranzo pone sobre la mesa la necesidad de reformar el artículo 9 de la propuesta del Gobierno, que, denuncia, mantiene el concepto de
trabajador eventual.
“Hay que
evitar terminologías que induzcan al error, porque este planteamiento deja abierta la puerta a perpetuar interinos a través del concepto de eventual”, argumenta.
Líneas rojas del Sindicato de Enfermería
Una “verdadera” desaparición de la palabra
eventualidad y un
compromiso por parte del Ministerio de Sanidad por continuar negociando el
Estatuto Marco son también las dos líneas rojas del
Sindicato de Enfermería (Satse) ante la amplia (y urgente) reforma de la normativa.
Rafael Reig, secretario general de Acción Sindical del sindicato enfermero, subraya otros puntos de especial interés e importancia para la organización, como los trienios, el
nombramiento de relevo para facilitar el derecho a la jubilación parcial o el establecimiento de herramientas que permitan un
control de la temporalidad para que “no se dispare”.
“Estamos en la recta final y necesitamos que haya voluntad por llegar a un acuerdo”, explica Reig, destacando que, en estos momentos, Satse opta por la prudencia y está concentrado en la propuesta conjunta que harán llegar a Sanidad en los próximos días. “Es una cuestión urgentísima y el Ministerio tiene que valorar quiere tener acuerdo sindical;
es el momento decisivo”, sentencia.
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