Los positivos resultados se obtuvieron con azacitidina y pomalidomida



17 jun. 2014 11:27H
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Jordi Martí, director general de Celgene en España.

Redacción. Milán
La multinacional Celgene ha aprovechado el Congreso de la Sociedad Europea de Hematología, que se celebra en Milán del 12 al 15 de junio, para presentar nuevos y mejores resultados de sus terapias en supervivencia global frente a la leucemia mieloide aguda (LMA) y el mieloma múltiple (MM).

En el terreno de la LMA, la compañía ha comunicado los datos procedentes del estudio AML-001, ensayo pivotal en fase III de desarrollo, global, multicéntrico, aleatorio y abierto. Esta investigación analizó los resultados obtenidos con azacitidina (Vidaza) en comparación con los regímenes convencionales de tratamiento (CCR) en pacientes con 65 o más años con LMA recién diagnosticada con una cifra superior al 30% de células blásticas en la médula ósea.

Los pacientes estudiados fueron preseleccionados para recibir uno de los siguientes tres regímenes de tratamiento, según la decisión del investigador: quimioterapia intensiva (régimen estándar 7+3), Ara-C en baja dosis (20 mg SC dos veces al día durante 10 días en ciclos de 28 días) o únicamente cuidados de apoyo. Los pacientes fueron entonces aleatorizados a recibir azacitidina (n=241) (75 mg/m2/d SC durante 7 días por cada ciclo de 28 días) o su régimen convencional de tratamiento CCR (n=247).

La mediana de supervivencia global (SG), el objetivo principal del estudio, fue de 10,4 meses (95 por ciento CI 8,0-12,7 meses) en los pacientes a los que se administró azacitidina en comparación con los 6,5 meses (5,0-8,6) en aquellos que recibieron CCR (HR=0,84 no estratificado [95 por ciento CI 0,69, 1,02], p=0,0829).

Además, se desarrolló un análisis de sensibilidad pre-especificado en cuanto a SG en el que se registró a los pacientes al inicio de la terapia posterior frente a la LMA. Los resultados de este análisis mostraron una mediana de SG significativamente mayor en los pacientes tratados con azacitidina (12,1 meses 95 por ciento CI, rango 9,2-14,2 meses) en comparación con los pacientes que recibieron CCR (mediana de 6,9 meses 95 por ciento CI rango 5,1-9,6 meses) (estratificado HR=0,76 [95% CI 0,60, 0,96], p=0,019). La supervivencia a 1 año fue del 47 por ciento en los pacientes que recibieron azacitidina en comparación con el 34% de los que se expusieron al CCR).

“Existen importantes necesidades médicas a las que debemos dar una respuesta en el área de la leucemia mieloide aguda en pacientes de edad avanzada. Este estudio nos ha permitido tener una visión clínica clara”, explica el Pr. Hervé Dombret, del Hospital de Saint-Louis (París), quien ha presentado las conclusiones del estudio en el Congreso EHA.

Nuevos datos en pacientes con mieloma múltiple

También en el marco del Congreso EHA, Celgene ha dado a conocer los datos procedentes de un análisis secundario del estudio MM-003. Éste es un trabajo en fase III enfocado a evaluar el resultado de administrar pomalidomida (Imnovid) en combinación con dexametasona en baja dosis en comparación con altas dosis de dexametasona en pacientes con mieloma múltiple refractario que son resistentes a bortezomib y lenalidomida (habiéndose administrado estas terapias por separado o de manera conjunta).

Los datos principales del ensayo MM-003, que la combinación de pomalidomida con bajas dosis de dexametasona vs dexametasona en altas dosis, fueron previamente comunicados (San Miguel et al, Lancet Oncology 2013). Debido a la mejora en cuanto a eficacia y tolerancia, más del 50% de los pacientes que recibieron altas dosis de dexametasona pasaron a recibir un tratamiento posterior con pomalidomida y dosis bajas de dexametasona. Así, el objetivo de este análisis secundario fue estimar las diferencias en SG que existían entre los dos brazos del estudio después de realizar este tipo de traspasos.

Siguiendo una metodología Weibull en dos fases, se procedió a la reevaluación de los datos de SG de los pacientes del brazo de tratamiento con dexametasona en altas dosis como si no se hubieran producido traspasos. Esto permitió una reestimación de la curva Kaplan-Meier. Después de los ajustes por estos traspasos, la SG debida al tratamiento combinado con pomalidomida y dexametasona en baja dosis fue superior a la de los pacientes tratados con dexametasona en altas dosis (12,7 vs 5,7 meses, p <0.002).
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