Solo 2 de cada 10 médicos toman genéricos

Eduardo Ortega Socorro. Madrid
Los medicamentos genéricos, a pesar de que los órganos reguladores dan fe de su seguridad y eficacia, todavía tienen muchas reticencias que vencer… incluso entre los profesionales sanitarios. Y es que solo dos de cada 10 médicos consumiría genéricos, y menos de la mitad de los profesionales piensa que estos productos ayuden a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Miguel Ángel Ruíz Ibán, médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica del Hospital Universitario Ramón y Cajal; Berna Buenestado, directora general adjunta de Kantarhealth; Juan José F. Polledo, director de Acceso, Relaciones Institucionales y Comunicación de Pfizer España; Luis García-Giralda Ruiz, médico especialista en Atención Primaria del Centro de Salud Murcia – Centro San Juan (Murcia), y  Antonio Torralba, presidente de Conartritis.Pie

Así lo indica una encuesta realizada KantarHealth con el patrocinio de Pfizer en 235 médicos de Atención Primaria y Especializada y 2.556 ciudadanos españoles mayores de edad, que también revela que para el 68 por ciento de los profesionales los fármacos de marca garantizan que va a continuar la investigación en medicamentos innovadores, mientras que el 60 indica que facilita el reconocimiento de la medicación por parte de los pacientes.

Esta condición o ventaja es especialmente defendida por Luis García-Giralda Ruiz, profesionales de Atención Primaria en el Centro de Salud Murcia-Centro San Juan (Murcia), quien avisa de las pérdidas que puede ocasionar la interrupción de la adherencia terapéutica por introducción de genéricos. “Los estudios revelan que mantener el uso de las marca permite reducir los costes sanitarios un 20 por ciento”, asegura, y defiente que falta el paso fundamental de la bioequivalencia.

De hecho, la consulta revela que, desde la perspectiva los médicos, el cambio de medicación provoca confusión en los pacientes y errores en la toma de las dosis. Por otro lado, casi un tercio de los encuestados reconoce que ignora la Ley 29/2006 de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, entre cuyos contenidos se encuentra la posibilidad de que el médico, a igualdad de precio, pueda prescribir marca”

Aunque Miguel Ángel Ruíz Ibán, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica en el Hospital Universitario Ramón y Cajal (Madrid), advierte de que lo que no quieren los profesionales es que “se prohíban los genéricos”, advierte de que “estamos en una fase de demonización de las marcas”, que defiende, entre otras cuestiones, porque son las compañías que los producen las que invierten en I+D y son las que colaboran en la formación médica.

El paciente desconoce derechos y posibilidad

Por otro lado, la encuesta de la compañía americana también revela que el paciente desconoce gran parte de la legislación sanitaria en materia farmacéutica, y los derechos que emanan de ella. De esta manera, el 65 por ciento de los ciudadanos consultados ignora que existe la Ley de autonomía del paciente, que es la que le posibilita para pedir al médico que prescriba un fármaco de marca, en lugar de un genérico, si lo pide (y se dan las condiciones).

Asimismo, el 69 por ciento de ellos desconoce que los fármacos originales tienen el mismo precio que el genérico y, de hecho, el 85 por ciento considera que los EFG representan un gran ahorro respecto a las marcas.  Sin embargo, el 65 por ciento de los encuestados advierte de que no le gustaría que recibir un medicamento con distinto nombre con cada receta. ¿La razón? La posibilidad de los errores a la hora de tomarlo, según la mayoría.

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