Javier Barbado / La prevención y el cuidado del pie a menudo se descuidan en la asistencia sanitaria tanto pública como privada. Sin embargo, se sabe que, si no se hiciera, los costes bajarían porque se eludirían complicaciones de enfermedades metabólicas como la diabetes mellitus, por citar una de las más frecuentes en su relación con el pie. La entrevistada acaba de abrir una clínica con el aval de veinte años de experiencia clínica previa para contribuir en lo posible a una atención pormenorizada de este fundamental aspecto de la salud.
Ana Esther Levy. |
¿Por qué se ha decidido a inaugurar una clínica especializada en el pie?
Llevo veinte años ejerciendo mi labor asistencial y he constatado que existe un gran vacío en el tratamiento y diagnóstico adecuado de la patología del pie. Es uno de los “cajones de sastre” de la sanidad. Existe poca cultura podológica, no sólo entre la población, sino también entre los propios profesionales de la salud. Se asume que el dolor en los pies, la fatiga o las constantes molestias con el calzado forman parte de la “normalidad” y no revisten importancia. Sin embargo, estas situaciones merman la calidad de vida de muchas personas hasta límites de gran importancia.
El pie exhibe problemas cutáneos, musculares, óseos, articulares, vasculares y neurológicos que deben enfocarse de manera integral y multidisciplinar. El pie es un órgano diana de muchas patologías sistémicas y debe abordarse en el contexto específico de cada paciente. En más ocasiones de las deseables se realizan pruebas complementarias, cirugías y tratamientos innecesarios o inadecuados con resultados muy poco satisfactorios, por la falta de una visión conjunta e interdisciplinar. El paciente se atiende “a trozos” y no de manera global e individualizada.
¿Dónde tiene su sede el centro?
Nuestro centro está situado en una “isla del centro de Madrid” alejada del tráfico intenso y el bullicio pero perfectamente conectada. Estamos en la Plaza del Conde del Valle de Suchil nº 14, junto al Hospital de Madrid. Una zona muy céntrica con un entorno muy agradable y accesible tanto en transporte público como privado.
¿Cuántos especialistas trabajan en la clínica?
La clínica cuenta con un equipo de cuatro expertos y una red de consultores externos que garantizan el tratamiento más específico en cada caso. Nuestra ventaja competitiva radica en la comunicación y coordinación interprofesional.
¿Qué perfiles profesionales poseen los trabajadores del centro?
Nuestro equipo se caracteriza por su alta orientación al paciente, la cercanía personal y una práctica clínica de excelente nivel. Compaginamos la actividad clínica con la docencia en la universidad y la presencia activa en sociedades científicas y foros profesionales. De esta manera podemos ofrecer a nuestros pacientes una práctica basada en la evidencia científica y totalmente actualizada.
¿Por qué se dota a la clínica de una Unidad especializada en el pie diabético?
La diabetes es una de las enfermedades que más avanza en nuestra sociedad. Más de la mitad de las amputaciones que se realizan en nuestro país son consecuencia de las complicaciones del pie diabético y, lamentablemente, las cifras de complicaciones aumentan cada año.
Es necesario detectar el pie en riesgo y tratarlo específicamente. De esta forma se puede evitar entre el 50 por ciento y el 70 por ciento de las complicaciones. Nuestro equipo ha sido pionero en el sistema público de salud y su labor es de reconocido prestigio a nivel profesional tanto nacional como internacional.
Lamentablemente, las personas con diabetes aún no disponen de la cobertura deseable en todas las áreas sanitarias de nuestra comunidad autónoma. No sólo en el sistema público: tampoco en las aseguradoras privadas existen equipos coordinados y especializados en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las complicaciones del pie diabético. Por ello hemos creído imprescindible que todo aquel que necesite nuestros cuidados pueda optar a ellos.
¿Se prevé ampliar las prestaciones actuales de la clínica?
Inicialmente estamos dotados de toda la tecnología, el conocimiento y los contactos necesarios para dar respuesta a nuestros pacientes pero, lógicamente, si detectáramos la necesidad de ampliar nuestras prestaciones, lo haríamos. Nos orientamos a la mejora continua y avanzaremos en función de los requerimientos de cada momento.
¿Llevan a cabo algún tipo de labor preventiva para eludir que la población enferme del pie?
Por supuesto. No sólo realizamos educación sanitaria de nuestros pacientes y sus familiares, sino que también participamos en eventos divulgativos y científicos de diversa índole para concienciar de la necesidad de mantener la salud podológica.
Nuestra unidad de educación y divulgación pretende realizar una labor social importante y convertirse en un agente activo de salud en nuestra comunidad autónoma. Cualquier profesional de la salud o asociación de pacientes que requiera un programa preventivo puede solicitarnos la realización de talleres, programas educativos y campañas de detección. La educación sanitaria me fascina y dedico de manera altruista una parte importante de mi actividad a ello.
¿Por qué es tan relevante la salud del pie?
Nuestros pies, además de ser la base del aparato locomotor y tener sus trastornos específicos, son la diana de múltiples enfermedades de origen sistémico (diabetes y otros trastornos metabólicos, enfermedad vascular, neuropatías, enfermedades reumáticas, trastornos dermatológicos, etc.).
Una persona que sufre cualquiera de las alteraciones antes mencionadas necesita soluciones que sólo un centro como el nuestro puede aportar: desde el cuidado más básico de la piel y las uñas en los casos más sencillos, hasta un abordaje global que integre todos los aspectos necesarios para devolver la salud a los pies y/o prevenir las graves complicaciones que pueden aparecer en el curso de las enfermedades cardiovasculares, metabólicas, neurológicas e incluso durante el transcurso de tratamientos inmuno-moduladores, desgraciadamente tan frecuentes a consecuencia del auge de las patologías oncológicas y autoinmunes.
¿Cree que este campo lo cubre de forma óptima el sistema sanitario público?
El sistema público, de manera general, no cubre la asistencia podológica ni tan siquiera en los casos de máximo riesgo de complicación. Los tratamientos de descarga y fomento de la cicatrización están en su mayoría exentos de cobertura no sólo en la red pública de salud, sino también en la red privada. Las compañías de seguros sólo cubren pobremente el tratamiento de callosidades y uñas tres veces al año y con unas tarifas irrisorias que hacen que los profesionales consideren poco rentable y altamente arriesgado implicarse en el tratamiento del pie diabético.
Por ello, resulta necesario concienciar no sólo a la población, sino también a los responsables de los sistemas públicos y privados de atención sanitaria, ya que es un hecho demostrado que la prevención y el cuidado especializado del pie ahorra millones de euros en costes sanitarios directos y millones de euros es costes indirectos derivados de los periodos de baja médica, rehabilitación, transporte sanitario, asistencia domiciliaria, etc. Obviamente, no debemos olvidar lo más importante y menos tangible que es, sin duda, el ahorrar a nuestros pacientes y sus familias todo el sufrimiento derivado de las complicaciones del pie de riesgo.