Un
44 por ciento de los estudiantes considera que, en términos de
prestigio, los estudiantes de
Ciencias de la Salud se sitúan en la
cima de la jerarquía académica, y superan ampliamente a otras ramas como Ingeniería y Arquitectura. Sin embargo, se ven desafiados en aspectos como la preparación para el siglo XXI y la
cultura general. Solo un 16 por ciento de ellos se siente preparado para el futuro y un escaso
8 por ciento considera que poseen una
cultura general sólida. A pesar de esto, son los estudiantes
más satisfechos con su elección de carrera.
Así lo ha reflejado un
estudio realizado por la Fundación BBVA sobre la
percepción de los universitarios en España, que muestra las diferencias en la
dedicación al estudio y la investigación según las diferentes ramas de conocimiento.
¿Quiénes son los estudiantes que más se esfuerzan?
Un aspecto a destacar de este análisis, es que señala que, para sorpresa de muchos,
los estudiantes de Ciencias de la Salud no son vistos como los estudiantes “que más se esfuerzan”. La cima, en esta categoría, la llevan los alumnos de
ingeniería y arquitectura, considerados los más aplicados por un 39 por ciento de los encuestados. Los siguen, ahora sí, los estudiantes de la rama sanitaria, seleccionados por un 38 por ciento.
Gráficas del estudio sobre la percepción de los estudiantes universitarios.
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Los estudiantes dedican una media de algo más de
30 horas semanales a la asistencia a clases y estudio. Esta cifra supera las
36 horas entre los alumnos de ingenierías, ciencias experimentales y
Ciencias de la Salud. En concreto, los de ingeniería y arquitectura, dedican un total de 38,6 horas, los de la rama sanitaria 36,7 y los que dedican su tiempo a las ciencias experimentales 36,5.
Más en concreto, los alumnos de Ciencias de la Salud invierten de media
13,2 horas a la semana al estudio. La cifra coincide en cuanto al tiempo que dedican a las clases teóricas y disminuye, ligeramente, a 10,3 si nos referimos a las prácticas. Las altas horas invertidas a la semana en el estudio hacen que
Medicina y la Enfermería sean consideradas unas de las carreras con mayor exigencia a nivel mental.
La lucha entre la rama de ingeniería y la sanitaria también se refleja en el campo de las
salidas laborales. Un
31 por ciento de los encuestados cree que los estudiantes de Ciencias de la Salud tienen
más oportunidades laborales, aunque un 40 por ciento considera que los de Ingeniería y Arquitectura lideran en este aspecto.
La vocación lidera en sanidad
Tal y como muestra este análisis, los estudiantes de Ciencias de la Salud destacan entre quienes
eligieron la carrera en mayor medida por factores vocacionales (un 40 por ciento) y son, además, los más
satisfechos en cuanto a la elección de carrera. Un 81 por ciento de los encuestados ha señalado que volverían a estudiar lo mismo si tuvieran que volver a elegir.
Además, este grupo de estudiantes se encuentra entre los más implicados a nivel de
investigación. De esta forma, un 51 por ciento de los encuestados ha afirmado conocer algún
programa o
proyecto de investigación que se lleve a cabo en su facultad, una cifra superada únicamente por los estudiantes de ciencias experimentales, con un 65 por ciento.
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