En un futuro próximo los médicos tendrán que cotizar durante 40 años para poder alcanzar la pensión máxima

Ni reducirla ni alargarla: callejón sin salida en la jubilación sanitaria
Vicente Matas, experto en el ámbito sanitario y miembro del Sindicato Médico de Granada (Simeg).


SE LEE EN 5 minutos
En el debate sobre la jubilación anticipada de los médicos ha entrado en el tablero en los últimos meses. Vicente Matas, experto en el ámbito sanitario y miembro del Sindicato Médico de Granada (Simeg), ha compartido con Redacción Médica las dificultades y consecuencias de esta opción junto con las de alargar el empleo durante unos años más. En ese sentido, Matas asegura que "ambas opciones tienen su desventajas" y desarrolla los diferentes cambios para poder revertir la situación en la que se encuentra la Medicina.

Los médicos pueden solicitar la jubilación anticipada "un año antes de la edad legal de jubilación", que actualmente es de 65 años para quienes han cotizado al menos 38 años y 3 meses. Sin embargo, si no se cumplen estos requisitos, "tienes que esperarte a jubilarte posiblemente el año que viene o el siguiente con 66 años y 10 meses o con 67 años, ya que depende en el mes en que hayas nacido", destaca Matas.

El principal problema de la jubilación anticipada es la importante reducción en la pensión que conlleva para aquellos que se quieran acoger a ella. "Si te jubilas dos años antes, te quitan un 21 por ciento sobre la base reguladora", señala Matas. Además, si la pensión resultante sigue siendo superior a la pensión máxima establecida por la Seguridad Social, "te quitan también este año un 7,40 por ciento más sobre la pensión máxima". Esto significa que los médicos que decidan retirarse antes de tiempo verán recortados significativamente sus ingresos en la jubilación.

"Si un médico se jubila dos años antes le podrían quitar hasta un 21 por ciento sobre la base reguladora"


Los problemas de prolongar la vida laboral


Por otro lado, prolongar la vida laboral tiene incentivos. "El tiempo en activo supone un incremento de un 4 por ciento en la jubilación futura", lo que puede traducirse en unos 130 euros adicionales al mes, explica Matas. Esta cantidad, aunque parezca pequeña, "se revaloriza todos los años y a poco que sobrevivas siete u ocho años, el importe ya es mayor que los 12.000 euros brutos que te ofrece la Seguridad Social por jubilarte más tarde".

El problema de la cotización de las guardias es otro factor clave. "Las guardias no cotizan para la pensión, lo que significa que muchos médicos, a pesar de trabajar más horas, no ven reflejado ese esfuerzo en su jubilación", advierte. Esto afecta especialmente a los médicos más jóvenes, que tendrán más dificultades para alcanzar el tiempo mínimo de cotización exigido en el futuro.

Matas también subraya que "los médicos que se jubilan ahora suelen alcanzar la pensión máxima", que este año es de 3.267 euros al mes en 14 pagas, pero advierte que "con los cambios en los años de cotización exigidos, los futuros médicos podrían no lograrla tan fácilmente". Actualmente, se requieren unos 36 años y medio de cotización para alcanzar esa cifra, pero "en el futuro podrían ser 40 o más años", algo complicado en una profesión con una carrera universitaria tan larga.

"La jubilación activa tampoco es una opción muy optimista porque, pese a cobrar el 75 por ciento de la pensión, al tener dos pagadores en la renta se encarece mucho"



Además, la jubilación activa, una opción que permite seguir trabajando mientras se cobra una parte de la pensión, tampoco es muy atractiva. "Le pagan el 75 por ciento de la pensión, pero al tener dos pagadores, la declaración de la renta se encarece mucho", comenta. Esto implica que muchos médicos prefieren simplemente retrasar su jubilación en lugar de acogerse a esta alternativa.


Los retos del SNS


Desde una perspectiva general, Matas concluye que "el sistema actual no incentiva la jubilación anticipada para los médicos" y que, de hecho, "muchos de ellos se ven obligados a prolongar su vida laboral si quieren garantizar una pensión digna". Este problema, sumado a la falta de relevo generacional en el sector sanitario, hace que cada vez más voces pidan una revisión del sistema para adaptarlo a las necesidades reales de los médicos.

En este contexto, la Sanidad Pública también se enfrenta a un desafío importante. "Si los médicos se jubilan antes de tiempo, habrá un déficit de especialistas en un sistema ya tensionado", advierte Matas. La falta de médicos jóvenes que reemplacen a los que se retiran y la sobrecarga de trabajo hacen que cada vez más facultativos opten por prolongar su actividad profesional, no sólo por razones económicas, sino también por la responsabilidad con sus pacientes. "Es fundamental que se tomen medidas para incentivar el relevo generacional y garantizar un equilibrio en la Sanidad Pública", concluye.
PARA SEGUIR LEYENDO, REGÍSTRATE GRATIS ¿Ya eres premium? Inicia sesión
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.