La sanidad, a la cola del impulso al empleo pese a la leve mejoría en 2023

La tendencia a la baja que caracterizó el impulso de la demanda de mano de obra en el sector sanitario en 2022, que presentó un modesto crecimiento de un 1,1 por ciento, ha sido superada en 2023. De este modo, las cifras durante el segundo trimestre de este año alcanzan ya un crecimiento de un 1,7 por ciento. A pesar de este aumento, esta rama no destaca entre el resto de campos y se sitúa en el puesto número once de una lista de quince sectores.

Estos datos han sido recogidos en el último observatorio del Ministerio de Trabajo y Economía Social, titulado "Seguimiento de indicadores de empleo de la Estrategia Europea 2020/2030". Según este informe, el 2023 dejó atrás la baja tendencia de crecimiento en el sector sanitario de 2022, (con un 0,3 por ciento en el tercer trimestre y un 0,2 por ciento en el cuarto), ha llegado a alcanzar un 2,6 por ciento durante el primer trimestre de este año, una cifra muy superior a las presentadas durante los últimos trimestres del año pasado.

No obstante, al ámbito sanitario permanece a la cola de una lista encabeza por los organismos territoriales o las actividades inmobiliarias, que alcanzan un crecimiento de un 55,6 por ciento y 20 por ciento respectivamente. En tercer y cuarto lugar se encuentran las actividades profesionales, científicas y técnicas, que registran un crecimiento de un 12 por ciento, y el transporte y almacenamiento, que presenta un 7,4 por ciento.

Impulso al sector sanitario por parte de Europa

Este observatorio presenta la información sobre la evolución a nivel europeo y de España hacia los objetivos marcados en la Estrategia Europa 2020, reformulada en el horizonte del año 2030, y pone en contexto el análisis de los aspectos más relevantes, entre los que se encuentra el impulso del ámbito sanitario.

Además, esta Estrategia se caracteriza, entre otros aspectos, por garantizar “la existencia de unos servicios asequibles, accesibles y de calidad, como la atención y educación infantil, la asistencia extraescolar, la educación, la formación, la vivienda, los servicios sanitarios y los cuidados de larga duración”.

En el ámbito de la salud, especifica que los Estados miembros, incluida España, “deben garantizar un acceso oportuno a una asistencia sanitaria asequible, preventiva y curativa” así como a unos cuidados de larga duración que sean “de calidad, preservando al mismo tiempo la sostenibilidad a largo plazo”.

En este contexto, a pesar de que durante este año este campo ha experimentado un crecimiento respecto a los datos del año anterior, las cifras deben continuar aumentando para equipararse a los datos de otros sectores y seguir impulsando la demanda de mano de obra para cumplir con los objetivos europeos y ofrecer un servicio de calidad.