En los pasillos del Parlamento Vasco, Darpón ha dado a conocer que el TSPJV desestimó el miércoles el recurso de la Abogacía del Estado contra la orden del Ejecutivo autonómico que regulaba la prestación sanitaria a las personas que no están aseguradas, incluidos los inmigrantes sin permiso legal de residencia.
En el País Vasco a estas personas se les exige un año continuado de empadronamiento y unos ingresos inferiores a la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) para tener derecho a la tarjeta individual sanitaria de Osakidetza y a un médico de cabecera.El consejero de Salud se ha felicitado por la decisión del TSJPV y ha explicado que lo que Euskadi plantea es la universalidad de la atención sanitaria. No obstante, ha recordado que el conflicto de competencias interpuesto por el Gobierno contra Euskadi sobre este asunto y sobre el copago farmacéutico todavía está pendiente de resolución definitiva en el Tribunal Constitucional.
El Departamento vasco de Salud ha considerado que la decisión del TSJPV "exige al Gobierno español un giro de 180 grados", sobre todo "cuando el Consejo de Europa ha tachado de ilegal no dar asistencia a las personas sin recursos económicos ni documentación en regla". Darpón ha hecho hincapié en que "la salud es un derecho incuestionable de las personas y no una consecuencia de la cotización a la Seguridad Social".