Redacción. Madrid
La Sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha admitido por investigar el caso de las prótesis mamarias PIP (Poly Implant Prothese), al apreciar un delito contra la salud pública, ha informado la Asociación Nacional de Afectadas (ANAP), que ha presentado la querella.
Hace unas semanas, el bufete que representa a la asociación presentó una querella ante los Juzgados Centrales de Instrucción de la Audiencia Nacional, que inicialmente fue inadmitida por el titular del Juzgado Central de Instrucción nº 3 de la Audiencia Nacional, el magistrado Javier Gómez Bermúdez, al entender que "los hechos descritos no eran penalmente relevantes, sumado a la falta de competencia objetiva de la Audiencia Nacional".
Sin embargo, se interpuso recurso de apelación ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, cuya Sección Tercera, con fecha 20 de junio de 2013, acordó estimar el recurso formulado y en consecuencia admitir la querella al "apreciar indicios de criminalidad, de cuyo conocimiento resulta competente".
Hasta el momento, la Audiencia había desestimado las querellas interpuestas por otras afectadas, por no haber sido acreditada por éstas la relevancia penal de los hechos y/o la competencia objetiva de este órgano jurisdiccional.
Desde el bufete, destacan que "con la admisión a trámite de esta querella, se inicia un procedimiento judicial, tendente al esclarecimiento y depuración de responsabilidades, en uno de los mayores fraudes sanitarios cometidos en la historia reciente de España, vinculado a las prótesis mamarias PIP". El escándalo de los implantes mamarios PIP ha provocado miles de denuncias después de que en 2010 fueran retirados del mercado al descubrirse que usaban silicona industrial.