Redacción. Barcelona
Desde que entrara en vigor la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia y a las familias de España en 2007, un total de 59.750 catalanes han muerto durante el proceso de acceso al cobro de la prestación. De ellos, el 15,5 por ciento fallecieron durante 2012.
Neus Munté. |
Así lo ha explicado en respuesta parlamentaria la consejera de Bienestar Social y Familia de la Generalitat, Neus Munté, que especifica el conjunto de personas fallecidas durante todo el proceso, aunque la pregunta del diputado del PP Pere Calbó solicitaba exclusivamente el número de fallecidos que no habían cobrado pese a que tenían el derecho reconocido en vida a través de un plan de atención individualizada (PIA).
Fuentes de la Consejería han explicado a Europa Press que la cifra de fallecidos facilitada por Munté tiene en cuenta a todas las personas que han hecho una solicitud, aunque quizás después no cumplieran los requisitos para el cobro, por lo que la han desvinculado de retrasos o errores en los pagos.
El periodo comprendido entre 2008 y 2010 fue el que registró más fallecidos esperando a entrar en el circuito se cobro de la dependencia, con 39.063, el 65,3 por ciento del total de los últimos seis años (14.232 en 2008, 13.849 en 2009 y 10.982 en 2010). Aunque en 2011 hubo una importante disminución, con 6.862 fallecidos, en 2012 se produjo un repunte de las muertes hasta las 9.301 personas, lo que supone un incremento de un 35,5 por ciento en un año.
Todas las cifras desde 2008 quedan muy lejos de las registradas en 2007, cuando murieron 4.521 personas que habían solicitado ser valoradas de su grado de dependencia.