Sara García del Real, enfermera y opositora al EIR.
Este sábado más de 7.235 enfermeros y enfermeras optarán a una de las
1.693 plazas de Enfermero Interno Residente convocadas para este año 2021. Una cita marcada por la pandemia de coronavirus y que ha añadido una serie de complicaciones más a las que normalmente tienen estos opositores, ya que aquellos que sean
positivos de Covid-19 o se encuentren en
cuarentena perderán la oportunidad de presentarse.
En el caso de Sara García del Real, las
probabilidades de tener que quedarse en casa por uno de estos supuestos
aumentan ya que es madre de tres hijos, dos de ellos escolarizados en Educación Infantil, quienes mientras están en clase no llevan mascarilla. Esta enfermera explica a
Redacción Médica que en su situación esta posibilidad es elevada y "el temor también te hace perder calidad de estudio".
Sara se presentó hace diez años por segunda vez al examen EIR y aunque en aquella ocasión no se lo había preparado, ahora es diferente. Tras una pausa larga por maternidad, ha considerado que
esta prueba es "una buena forma para incorporarme y reciclarme".
Aunque actualmente no esté trabajando,
tener tres hijos a su cargo complica las horas de estudio. "Es prácticamente imposible concentrarse con ellos en casa, por lo que dedico a estudiar casi todo el tiempo que están en el colegio", explica. "Además
cualquier rato de tranquilidad lo aprovecho para hacer algún test o repasar alguna cosa. He procurado no alterar demasiado la dinámica familiar y nuestra rutina habitual".
Sara detalla que el aspecto que más se ha visto afectado han sido las tareas del hogar, ya que no puede dedicarles prácticamente nada de tiempo a diario y desde que comenzó a preparar el examen, las hacen "en familia los fines de semana". A su vez, confiesa que
lo más difícil ha sido hacer ver al resto de la familia que no está dedicada a ser madre el cien por cien del tiempo, cuando están acostumbrados a ello. "Me lo tomo como una
preparación ante el cambio que supondrá mi incorporación al mundo laboral", explica.
Incertidumbre ante las preguntas sobre el Covid-19
"Lo peor es el miedo a dar positivo o ser contacto estrecho pocos días antes del examen, lo cual significaria no poder asistir"
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Respecto al estudio, lo está preparando por su cuenta, sin apoyo de academia ni tutor. "Al haber empezado con poca antelación, hace tres meses, mi estrategia
ha sido priorizar mucho los temas más preguntados y realizar gran cantidad de simulacros y exámenes anteriores", explica. Aunque la pandemia no haya cambiado en sí su rutina de estudio, esta enfermera no puede contar con apoyo de gran parte de su familia ya que esta reside en otra comunidad autónoma y su ayuda le vendría bien para poder estudiar más tiempo durante el fin de semana.
Así, insiste en el
miedo "a dar positivo o ser contacto estrecho pocos días antes del examen, lo cual significaría no poder asistir". También destaca la incertidumbre que generan "posibles preguntas que puedan poner sobre la pandemia, nunca hasta ahora realizadas".
Sara prefiere no predecir
cómo será el resultado de la prueba que realizará este sábado 27 de marzo ya que a pesar de sus esfuerzos, es consciente que "
se presentan compañeras mucho más preparadas que yo". No obstante, confía en tener "un poquito de suerte y que los nervios no me jueguen una mala pasada".
"Si pudiera elegir, aún estoy
dudando entre dos especialidades, pues hay que tener en cuenta muchos factores como las salidas profesionales y en mi caso las
facilidades de conciliación familiar no solo durante la residencia, si no también después", relata esta enfermera.
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