Juan Carlos, R2 de Endocrinología y Nutrición y Carlos Yebra, R2 de Cardiología.
Tercero de Medicina. El momento en el que los estudiantes “crecen” y se alejan del calor de las aulas para adentrarse en los
pasillos de los hospitales de la mano de
residentes y
adjuntos que harán “todo lo posible” por enseñarles el funcionamiento de su especialidad. Los
MIR que adoptan el rol de tutores son los encargados de ‘capitanear’ esta nueva etapa cargada de emociones, dudas y sueños para conseguir que los alumnos a su cargo se conviertan en
médicos proactivos capaces de
salvar vidas en el futuro.
Para el residente de segundo año de
Endocrinología y Nutrición Juan Carlos,
@PerritoDelMir en Twitter, poder aportar los conocimientos que él ha ido adquiriendo durante sus años de especialidad le parece una experiencia “muy bonita y enriquecedora”.
“Me gusta tener a estudiantes a quienes les puedo explicar cosas que he aprendido y que a mí me hubiese gustado que me enseñaran durante mis años en la universidad. Es muy gratificante cuando te das cuenta de que están cómodos contigo y te
preguntan dudas sin miedo a que les hagas sentir mal por no saberlas. Al final, nadie nace sabiendo
Medicina”, ha afirmado.
Los MIR, tutores de estudiantes de Medicina
Juan Carlos empieza a estar acostumbrado de tener estudiantes a su cargo. Según su propia experiencia personal, suelen tener “muchas ganas de aprender”. “Son muy
proactivos y receptivos con los consejos que les damos. Nosotros, como médicos que hemos pasado por la carrera, tenemos que ser pragmáticos e ir al grano para
enseñarles las cosas útiles que les sirvan en su futuro”, ha reconocido.
Entre
los consejos que este futuro especialista suele dar, hay uno que prevalece por encima del resto: “disfrutar de las prácticas”. Tal y como indica, esta formación “no tiene que ser una carga” que se le sume a toda la teoría que tienen que estudiar de la universidad, sino más bien
una experiencia que disfruten. “Y mira que he tenido alumnos que quieren hacer especialidades opuestas a la mía, por ejemplo,
Traumatología, pero todos han estado muy interesados en aprender. Vienen con el objetivo de empaparse de conocimiento para formarse como médicos generales y convertirse en profesionales sin lagunas de información, pese a que haya algunos temas que nunca vayan a usar”, ha reconocido.
Cambios "necesarios" en las prácticas de Medicina
Aun así, no todo en las prácticas es de ‘color de rosa’. Alejado de la opinión de los propios estudiantes, Juan Carlos cree que hay
“aspectos esenciales” que deberían cambiar en la formación de estos jóvenes durante su paso por los hospitales.
“Muchas veces vienen a hacer las prácticas sin antes haber dado la
teoría de la especialidad. Entonces, vienen sin tener absolutamente ninguna idea de lo que van a ver. Tú les puedes explicar cosas básicas, pero no tienen dudas porque todo lo que les explicas es nuevo. Creo que con un cambio en este sentido se podrían aprovechar mucho más”, ha enfatizado.
Malas experiencias entre tutores y estudiantes de Medicina
A pesar de que la carga de trabajo que tiene un residente aumenta cuando está ‘tutorizando’ a un estudiante, Juan Carlos ha reconocido que eso no significa que sea algo “negativo”, y que son "muy agradecidos" cuando los tutores
les tratan con respeto.
“En ocasiones me han contado que han acabado con adjuntos que no les hacen caso e incluso que les tratan mal, y eso hace que se sientan como un estorbo o una planta decorativa. Entonces, yo, como residente, les trato como a mí me hubiese gustado que lo hicieran”, ha explicado.
Pese a que en algunas ocasiones pueda ocurrir este ‘desazón’ con los adjuntos, este futuro especialista ha reconocido que, normalmente, siempre están “cerca” para “echar un cable”, por si hay alguna duda que no le pueda resolver a los alumnos.
"Una estudiante me dio las gracias por tratarle bien durante las prácticas y me dijo que tenía fe en que las nuevas generaciones MIR estuvieran cambiando las cosas"
|
.
Como
anécdota, uno de los momentos “más bonitos” que ha vivido fue durante la despedida de una de sus estudiantes, quien le agradeció su trato y le explicó que tenía
fe en que las nuevas generaciones MIR “estuvieran cambiado las cosas” en cuanto al trato que se da durante las prácticas. “Me tocó la fibra y me hicieron muy feliz sus palabras”, ha subrayado.
Un agradecimiento similar al que recibió el residente de
Cardiología de segundo año
Carlos Yebra. En su hospital están últimamente recibiendo a muchos alumnos del Grado y, tras pasar las semanas allí aprendiendo, varios han manifestado su
tristeza por terminar su participación en el servicio.
“Les da mucha lástima tener que irse porque están muy cómodos y aprenden mucho. Yo creo que eso es lo más bonito. Enseñar a unos estudiantes que te recuerdan a ti hace nada y transmitirles tu pasión por la especialidad”, ha argumentado.
Tutorizar alumnos, una experiencia "muy enriquecedora" para los MIR
El
principal consejo que ha querido transmitir Yebra es que “nunca” se queden con dudas mientras están en las prácticas. “Tienen que esforzarse en
hacer preguntas útiles que ellos sientan que puedan aprender gracias a eso, y tienen que ser siempre proactivos”, ha detallado.
Para concluir y haciendo un
balance general, estos dos médicos han calificado la oportunidad de ser tutores como una experiencia “
muy enriquecedora” a nivel profesional que les hace sentir “muy bien” porque están ayudando a personas que, en ocasiones, se encuentran perdidas.
“La carrera de Medicina es muy larga y tienes muchas crisis existenciales y, al final, les echas un cable porque tú también has vivido esos sentimientos. Además, es un gusto hacerlo porque la mayoría intentan aprender todo lo posible, se esfuerzan en hacer preguntas y estudian y aplican los consejos que tú les das”, han finalizado.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.