Sanidad hace un desaire al fiscal en el caso de las amenazas entre médicos

La Consejería de Sanidad Universal y Salud Pública dirigida por Carmen Montón quiere esperar a que la justicia emita una sentencia en firme en el caso de las amenazas a un médico para que no cogiera la plaza asignada por la bolsa de trabajo para retomar su investigación. Eso, a pesar de que la Fiscalía de Valencia haya remitido a los juzgados de instrucción la pertinente denuncia.

Por tanto, aunque el fiscal sí ve indicios de delito, la institución prefiere no actuar hasta que la sentencia no dé su veredicto. “Hasta que no haya una resolución en terreno judicial no ejecutaremos movimiento alguno. En su momento se abrió un expediente informativo, que derivo en el inicio de un proceso sancionador. Sin embargo, todo se paralizó al llegar el tema a los juzgados. Ese es el procedimiento a seguir”, explican desde la Consejería al diario Levante.

El caso saltó a la luz el pasado mes de junio, cuando se difundió una grabación del momento en el que una anestesióloga jefe de sección del Hospital Clínico de Valencia presionaba a una aspirante para que renunciara a una plaza a través de la bolsa de la Consejería de Sanidad para trabajar en este servicio, con la advertencia de que si accedía mediante esta vía, le harían un "informe negativo" y estaría un mes en el puesto. A raíz de conocerse estos hechos, la Consejería advirtió de que no iba a tolerar "ningún tipo de práctica que no se ajuste a la normativa vigente" y aseguró que actuaría "con contundencia en cuanto detecte cualquier irregularidad".