Redacción. Murcia
La Sociedad Murciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Smumfyc) considera perniciosos para la salud los cigarrillos electrónicos por su potencial adictivo y pide a las autoridades sanitarias que amplíen lo antes posible su prohibición a todos los lugares públicos cerrados por el riesgo que representan.
La Organización Mundial de la Salud ha prohibido expresamente a los fabricantes que anuncien este producto como una forma de tratamiento del tabaquismo, ya que no existe ninguna evidencia científica que apoye su uso terapéutico.
Bernardina Tudela. |
Smumfyc apoya las reivindicaciones del Grupo de Abordaje de Apoyo al Tabaquismo de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), que propone la regulación de estos cigarrillos como un producto de tabaco más. La presidenta de Smumfyc, Bernardina Tudela, expone que la Consejería de Sanidad de Murcia debería instar al Ministerio de Sanidad a informar sobre los peligros para los menores de edad y limitar su publicidad, como recoge la Ley Antitabaco.
Los médicos de familia murcianos apuestan por mejorar las supervisiones sanitarias y reglamentar las sustancias utilizadas. En este momento, los cigarrillos electrónicos se distribuyen en la Región de Murcia como “productos para el fumador”. Desde hace dos años, su consumo se ha disparado por la aparición de múltiples puntos de venta (estancos y tiendas especializadas). Sin embargo, no está acreditado que consumir estos cigarrillos sea menos dañino que el tabaco tradicional. Estos dispositivos se componen de una batería, un atomizador y un cartucho reemplazable, con variaciones importantes en su contenido (los hay que contienen nicotina suspendida en propilenglicol o glicerina y agua, pero también contienen componentes que son potencialmente peligrosos como formaldehído, acetaldehído, acroleína, nitrosaminas y metales pesados). Tudela ha agregado que la inhalación de dichas sustancias varias veces al día, durante meses o durante años, puede acarrear efectos fisiológicos adversos sobre la función pulmonar en individuos sanos, según estudios realizados, aunque no se ha demostrado con solvencia su relevancia clínica, ni se han podido valorar científicamente los efectos a largo plazo de una exposición continuada.
Smumfyc ha rechazado incentivar el uso de estos cigarrillos electrónicos ante las dudas suscitadas sobre los tóxicos incluidos en la composición de los mencionados cartuchos y porque convertir a los exfumadores en cigarrillos electrónicos “no ayuda a extender la cultura de la abstinencia completa” y expone la salud de los usuarios a nuevas sustancias que son dañinas para el organismo. Por tanto, Smumfyc reclama a los responsables sanitarios una intervención para la regulación del sector y garantizar científicamente el contenido del líquido que se vaporiza.