Sede de la Consejería de Sanidad de Madrid.
La
Comunidad de Madrid apunta este mismo mes a un paso clave en materia de
eficiencia en el
gasto y sostenibilidad de su sistema sanitario. Según ha sabido
Redacción Médica de fuentes de la Consejería de Sanidad, el Gobierno regional
publicará a finales de agosto la consulta pública para crear un ente clave para este fin: la
Agencia de Contratación Sanitaria de la Comunidad de Madrid.
El pasado 7 de agosto, la Consejería de Sanidad ya publicó una compra centralizada para el suministro de ropa plana, ropa para pacientes, quirófano y uniformidad,
con destino a los Hospitales del Servicio Madrileño de Salud (Sermas). Lo cual ya daba una primera pista de un
sistema de adquisiciones que se irá imponiendo progresivamente con el control de la citada Agencia. De hecho, fuentes de la Consejería explican que “aunque la compra de ropa centralizada ya se venía haciendo anteriormente, se enmarca dentro del modelo de eficiencia y establecimiento de estándares comunes de calidad
y se extenderá a otros bienes, servicios y suministros sanitarios, y para ello se va a poner en marcha la Agencia de Contratación Sanitaria de la Comunidad de Madrid”, señalan.
Una medida que tiene ahora que determinar
cuándo se pondrá plenamente en marcha, teniendo en cuenta (y así lo reconocen fuentes del Gobierno madrileño) que cuestiones administrativas como
“el periodo de alegaciones”, marcarán finalmente cuándo empieza a funcionar la Agencia de Contratación Sanitaria de la Comunidad de Madrid.
Un nuevo mecanismo de eficiencia que tendrá, además del respaldo de la consejera Fátima Matute, una importante labor en manos de
Juan José Fernández Ramos como viceconsejero y director general del Sermas; y de
José Macía Losada en calidad de director general de Gestión Económico-Financiera.
Un proyecto de varias legislaturas
Este periódico ya avanzó que el anterior equipo de la Consejería, liderado por Enrique Ruiz Escudero, estaba preparando una estrategia para dotar de mayor eficiencia al gasto sanitario de la Comunidad de Madrid. “La idea pasa por evitar que,
en materia de compras sanitarias, los hospitales de la Comunidad compitan entre sí”, matizaban entonces las fuentes consultadas.
Las mismas que añadían que dicha política de adquisiciones seguirá respetando la autonomía presupuestaria de los hospitales del Sermas:
“Cada hospital mantendrá también su propio presupuesto y, por tanto, independencia económica”.
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