Redacción. Santiago
Los sindicatos médicos CESM y O'Mega han asegurado que la reorganización de los servicios asistenciales en Atención Primaria en Galicia “no puede seguir criterios económicos”, sino “exclusivamente asistenciales” puesto que “su primer interés tiene que ser garantizar el derecho a la salud y a la asistencia sanitaria de toda la población en condiciones de equidad”.
Cándido Andión, presidente de CESM-Galicia. |
Así lo han manifestado ambos sindicatos en un comunicado, en el que han hecho pública su postura ante la posibilidad de que se puedan cerrar servicios de asistencia nocturna en algunos Puntos de Atención Continuada (PAC) de Galicia, “un tema fundamental para el futuro del sistema público de salud”.
Según han indicado los sindicatos, en patologías urgentes, especialmente en aquellas potencialmente mortales, “el tiempo de la primera atención puede suponer la irreversibilidad del proceso, que hace imprescindible la garantía de acceso en un máximo de veinte minutos”.
En este sentido, han señalado que el alto índice de dispersión de la población del rural gallego y su envejecimiento “obliga a mantener una red de PAC incluso con carga asistencial baja o muy baja”. “Suprimirlos sería como eliminar servicios de bomberos porque el índice de incendios es bajo”, han asegurado.
Asimismo, han considerado que utilizar un criterio económico y no asistencial “sería como poner precio a la potencial pérdida de una vida humana, al posible empeoramiento de una patología grave, o incluso a la angustia generada por el retraso de una atención que el paciente percibe como urgente, puesto que sólo el facultativo está capacitado para decidir sobre la urgencia real de una determinada patología”.
Por último, los sindicatos médicos han señalado que, en muchos casos, “suprimir los puntos de atención urgente de Primaria supone en la práctica la sobrecarga de los servicios de urgencias de los hospitales con el consiguiente incremento del gasto” por lo que “la medida no está justificada”.