Redacción. Barcelona
El secreto profesional no ha permitido a la Comisión de Salud aclarar si el horario del servicio de Hemodinámica del Hospital Joan XXIII de Tarragona resultó mortal para un paciente que sufrió un infarto y murió al ser trasladado a Barcelona.
Llorenç Mairal.
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El director del Hospital Joan XXII, Llorenç Mairal, ha anunciado durante su comparecencia que entre 15 días y un mes se contará con una segunda sala que, entre otros usos médicos, será apta para practicar angioplastias.
El responsable del Servicio de Emergencias Médicas de Cataluña (SEM), Francesc Bonet, y el director del Hospital Joan XXIII de Tarragona, no han aclarado en la comisión de salud si los protocolos fueron correctos por “secreto médico”. “El servicio de hemodinámica es muy especializado y no todos los infartados lo precisan, ya que consiste en practicar una angioplastia y hay una ventana médica de seguridad de 120 minutos entre el infarto y si tratamiento”, han asegurado.
“Cataluña es el segundo o tercer país de Europa en supervivencia o falta de secuelas”, ha explicado Bonet, gracias a la activación del llamado Código Infarto, que activa todo el dispositivo médico para atender a los que sufren ataques al corazón. Una vez activado este Código, el paciente tiene prioridad y en “más del 90 por ciento conseguimos que la arteria se desatasque”, según Bonet. Bonet ha contestado que la franja de seguridad de los 120 minutos se cumple en un 95 por ciento de los casos en Barcelona y en un 85 por ciento en el resto de Cataluña y el director del Hospital Joan XXIII lo ha atribuido a la mayor dispersión de los tarraconenses.
En el caso del Hospital Joan XXIII, de referencia para toda la provincia de Tarragona, la unidad de Hemodinámica consta de cuatro hemodinamistas, aunque uno se trasladará y “no podremos estar solo con tres mucho tiempo”, ha explicado su director.
El PSOE denuncia que Tarragona se sitúa 10 puntos por debajo de la media en la realización de angioplastias
En Tarragona se practican una media de un 73 por ciento de angioplastias, diez puntos por debajo de la media catalana y, según la diputada socialista Núria Segú, está a la cola catalana en practicarla entre los 0 y los 20 minutos tras el infarto.
El diputado popular Jordi Roca ha preguntado por qué en el 2015 se ha considerado conveniente ampliar el servicio de hemodinámica y en cambio, en el 2013, no, y no ha obtenido respuesta.
La diputada Lorena Vicioso (ICV-EUiA) ha preguntado sobre las limitaciones de contar con una única sala (que debe someterse a mantenimiento o puede sufrir averías) y ha pedido concreción sobre el personal médico.
La exconsejera de Salud y diputada socialista Marina Geli se ha centrado en los motivos de la menor activación de Código Infarto en Tarragona y se ha preguntado si los protocolos se aplican correctamente.
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