El Pleno del Parlamento de Cantabria ha aprobado este lunes por unanimidad una proposición no de ley que insta al Gobierno a "evaluar la posibilidad" de resolver el contrato actual de suministro de agujas para la inyección de insulina, ante las quejas de las personas diabéticas, y celebrar un nuevo concurso de adjudicación.
Durante el debate de la iniciativa, promovida por Ciudadanos, los grupos que sustentan al Gobierno, PRC y PSOE, han informado de que el Servicio Cántabro de Salud ha establecido un procedimiento para sustituir las agujas a los pacientes que lo soliciten, al que "sólo se han acogido 24 personas".
El portavoz de C's ha destacado que la diferencia entre adquirir la aguja que se está suministrando actualmente y la que resultó con mayor puntuación técnica en el concurso es de "3.000 euros". "Me cuesta mucho creer que se esté jugando con la salud de los pacientes por cantidades tan ínfimas", ha dicho Gómez, quien ha advertido que de forma indirecta se está fomentando la reutilización de agujas por parte de quienes conserven en sus casas las anteriores, que eran de mayor calidad.
En la misma línea, la portavoz de Podemos, Verónica Ordóñez, ha dicho que los niños diabéticos están rechazando pincharse por el dolor que producen las nuevas agujas, y ha instado a la consejera de Sanidad a buscar acuerdos con la empresa adjudicataria del contrato, Chicco, como se ha hecho en otras comunidades autónomas donde también ha habido quejas y críticas por estas mismas agujas. En la proposición no de ley aprobada por unanimidad también se pide a Sanidad que en la celebración del nuevo concurso se modifiquen los criterios, primando la parte técnica sobre la económica.