La lucha de Baleares contra el 'caladero de chamanes' de las pseudoterapias

Un nuevo acto sobre pseudoterapias médicas en Mallorca une a colegios profesionales, sociedades científicas y Administración para combatir este tipo de eventos. El pasado 26 de julio se celebró en esta ciudad una jornada titulada 'Libertad de expresión y libertad terapéutica', a cargo del polémico pseudocientífico Josep Pàmies. Un acto más en el que también participó el cantante Miguel Bosé y con la asistencia de Nadiya Popel, médica expulsada por el Col·legi de Metges de les Illes Balears (Comib) por infringir el Código de Deontología Médica, y Ángel Ruiz Valdepeñas, facultativo que ejercía en el hospital de Formentera antes de ser suspendido seis años por el Comib por sus manifestaciones de carácter negacionista durante la pandemia.

El acto sobre pseudoterapias fue denunciado tanto por el Comib como por la Sociedad Balear de Obstetricia y Ginecología, mientras que la Conselleria de Salut levantó acta contra los organizadores por promover tratamientos sin evidencia científica. El presidente del Comib, Carles Recasens, ha asegurado a Redacción Médica que el cometido del Col·legi es "proteger, informar y velar para que la población esté bien informada y no caiga en falsas expectativas o tratamientos pseudomiraculosos que no tienen ningún tipo de evidencia científica".

Por su parte, la Sociedad Balear de Obstetricia y Ginecología mostró su preocupación ante la divulgación de información pseudoterapéutica de una planta del género Kalaonche para el cáncer de endometrio. Su presidente, Octavi Córdoba, también denuncia este tipo de actos por "difundir tratamientos que no tienen ningún tipo de base para decir que tienen efectividad, desacreditar otros que sí la tienen y jugar con las esperanzas y momento de debilidad y fragilidad de los pacientes".

Frente común contra las pseudoterapias

A pesar de que desde la Administración de forma preventiva no se pueden prohibir este tipo de actos, en esta ocasión tanto el Comib como la Sociedad hicieron un llamamiento de alerta para recalcar que el uso de pseudoterapias no tiene el soporte en el conocimiento ni evidencia científica que avale su eficacia ni su seguridad, además de recordar que el ejercicio profesional precisa de un método científico.

Por todo ello, ambas entidades agradecen al Servicio de Inspección de la Conselleria de Salut que levantara acta contra los organizadores del acto de pseudoterapias después de constatar que incumplieron la normativa vigente en relación a la promoción de prácticas no autorizadas o de eficacia y seguridad no comprobadas.

"El Comib siempre nos encontrará a su lado para denunciar a los compañeros que no siguen el código deontológico y hacen publicidad de métodos que no han demostrado su eficacia y pueden inducir al error", ha detallado Córdoba. Por su parte, Recasens, hace hincapié en que tanto Administración, sociedades científicas, colegios profesionales e incluso medios de comunicación juegan cada uno su papel para supervisar este tipo de actos que pueden ser perjudiciales para la población.

Auge de pseudoterapias en Baleares

Recasens ha incidido en la tarea realizada por el Comib que preside, que expulsó a Popel del Col·legi por utilizar productos como lejía, agua oxigenada o disolvente industrial, sin base científica, para tratar a pacientes, y también sancionó "de forma contundente, como nunca se había hecho" a otro facultativo, Ruiz Valdepeñas.

Sobre el auge de las pseudoterapias en Baleares, ya sea por celebración de actos o médicos que las promueven, el presidente del Comib considera que es un "movimiento itinerante que, por desgracia, ahora ha tocado aquí". No obstante, Recasens ha defendido que la sociedad balear es "sensata, coherente y prudente para confiar en el sistema sanitario público y privado y el referente de su salud, que es su médico".

Finalmente, Córdoba ha deslizado que la realización de este tipo de eventos en Baleares surge de una "demanda de una parte de la sociedad interesada en tratamientos alternativos". Sin embargo, el presidente de la Sociedad Balear de Obstetricia y Ginecología remarca que su tarea debe ser "rigurosa y enérgica" para denunciar estas terapias. De hecho, la evidencia demuestra que incluso en aquellos pacientes con cáncer que complementan el tratamiento convencional con pseudoterapias tienen "un peor pronóstico", ha concluido Córdoba.