Redacción. Palma de Mallorca
La consejera de Familia y Servicios Sociales, Sandra Fernández, ha anunciado que el Gobierno de las Islas Baleares pondrá en marcha un programa piloto para implementar el Sistema de Atención Domiciliaria de alta intensidad (SAD) en varios municipios de la comunidad.
Sandra Fernández i Rafael Romero |
El objetivo es que, una vez superada esta fase, el Gobierno ofrezca definitivamente este servicio, como parte de la cartera de prestaciones dentro del marco de la Ley 39/2006 de la Atención a la Dependencia.
El SAD es un servicio que se lleva a cabo en el domicilio de la persona dependiente, mediante personal cualificado, que incluye una serie de actuaciones preventivas, formativas, rehabilitadoras y de atención a las personas que sufren dificultades para permanecer o desarrollarse en su medio natural.
Concretamente, las actuaciones que constituyen el SAD son servicios relacionados con la atención de las necesidades domésticas o del hogar: limpieza, cocina u otras. Además, se desarrollarán servicios relacionados con el cuidado personal, realización de las actividades de la vida diaria (acondicionamiento e higiene personal, ayuda para vestirse y comer, etc.).
El programa piloto se articulará a través de convenios del Plan de Prestaciones Básicas (PPB) con los diferentes consejos insulares, se iniciará en el momento de la firma y finalizará en junio de 2014. El coste total de este programa piloto es de 1.779.621 euros y la previsión es que se beneficien entre 140 y 170 personas, según las horas de atención que necesite cada caso.
Este nuevo servicio que se prestará permitirá reducir la lista de espera para acceder a una residencia en Baleares en un 13 por ciento, según ha comentado la consejera.
La consejería ha establecido una serie de requisitos. Por un lado, no tiene que existir participación económica en la prestación del servicio por parte de los ayuntamientos. Además, las horas de atención tienen que ser de un mínimo de 21 y un máximo de 60 por persona atendida y mes. Finalmente, los municipios se seleccionarán según la tasa de envejecimiento y priorizando los casos que se encuentran en una lista de espera para entrar a una residencia.
Este servicio que en breve ofrecerá el Gobierno está dirigido a personas mayores en situación de dependencia y tiene una mayor intensidad horaria que el SAD básico. Se pretende fomentar la autonomía personal en el ámbito habitual de las personas que presentan limitaciones para las actividades básicas de la vida diaria.
Sandra Fernández ha destacado las ventajas que presenta este servicio como es que la persona pueda recibir los cuidados en su hogar, en su entorno natural; o la creación de puestos de trabajo, que ha calculado serán unos 37 directos sólo con este programa piloto.