MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
Las moléculas de ARN de transferencia (ARNt) modificadas pueden reparar de manera eficiente y precisa mutaciones sin sentido con cualquier aminoácido, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Iowa (Estados Unidos) y que ha sido publicado en 'Nature Communications'.
El proceso de convertir el código genético en proteína se llama traducción. Los ARNt coinciden con el código del proyecto del ARN mensajero y suministran el aminoácido correcto en el orden correcto para construir la proteína. Las secuencias de códigos del ARN mensajero, que dictan el orden de los aminoácidos, se denominan codones. Las secuencias coincidentes en los ARNt se llaman anticodones.
Al final de cada secuencia de codificación de proteínas hay una señal de parada genética, un codón de parada, que le indica a la maquinaria de producción de proteínas que se detenga. Las mutaciones sin sentido se producen cuando un error en la secuencia genética convierte un codón de aminoácido en el medio de la proteína en un codón de parada.
Ante esto, los investigadores probaron sistemáticamente las moléculas de ARNt diseñadas para determinar su capacidad para reparar codones de parada prematuros con cada uno de los 20 aminoácidos naturales. La pantalla de alto rendimiento identificó de manera eficiente múltiples ARNt potentes diseñados para cada aminoácido y tipo de codón de parada.
Para demostrar que el enfoque podría funcionar en sistemas más complejos y fisiológicamente relevantes, los investigadores demostraron que los ARNt diseñados, cuando están codificados y formulados para una administración eficiente, se expresan en niveles altos y son efectivos para corregir mutaciones sin sentido en el tejido muscular del ratón vivo.
Curiosamente, la actividad del ARNt persistió durante semanas en las formas administradas, lo que sugiere que este enfoque de terapia génica sostenible puede tener potencial para ser utilizado en la clínica algún día. Además, los expertos mostraron que los ARNt eran selectivos en su actividad y no afectaban a los codones de parada normales que señalan el verdadero final de la secuencia de la proteína.