La previsión es que no se realicen más ajustes en esta cartera



5 may. 2014 10:50H
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Con la colaboración de
J. Barbado / R. Martínez / C. Mouriño. Madrid
Salvar el gasto social es la premisa que se han propuesto cinco de las seis comunidades que no han cumplido con el objetivo de déficit en 2013. Cataluña, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Aragón y Navarra han confirmado a Redacción Médica que no prevén realizar más ajustes en sanidad y servicios sociales. En el caso de la Región de Murcia, el nuevo equipo al frente de la Consejería de Sanidad y Política Social ha dejado entrever que se realizará algún ajuste en lo relativo a la estructura del Servicio Murciano de Salud.

Boi Ruiz, consejero de Salud de la Generalitat de Cataluña, Manuel Llombart, consejero de Sanidad de la Generalitat  valenciana, José Ignacio Echániz, consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, Ricardo Oliván, consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia de Aragón, Ricardo Oliván, Marta Vera, consejera de Salud de Navarra; y Catalina Lorenzo, consejera de Sanidad y Política Social de Murcia.


En el caso de Cataluña, fuentes de la Generalitat han confirmado a Redacción Médica que el dato exacto de déficit en el sector sanitario de esta comunidad autónoma en 2013 fue de 409 millones de euros. Preguntadas por las medidas que esperan llevar a cabo, su respuesta se ha centrado en criticar la normativa aprobada por el Gobierno central en este sentido en el Real Decreto 16/2012, texto que, en efecto, incluía medidas específicas de ahorro tanto en el ámbito de la sanidad como en el de la educación.

Según el Departamento de Economía catalán, en ese año la Generalitat calculó un ahorro en la autonomía, de haberse ejecutado al pie de la letra esas medidas estatales, de 748 millones. En cambio, el balance al concluir al año fue de tan solo 123 millones de euros no gastados.

Otro ejemplo que, según esta Consejería autonómica, demuestra las trabas sufridas por Cataluña para paliar el déficit por parte de la política del Ejecutivo central lo constituye el copago o ticket moderador de un euro por receta que se implantó y después se canceló por orden de este último. De haber prosperado tanto la normativa de ahorro estipulada en el decreto mencionado como el copago específico de un euro por receta –aseguran las mismas fuentes–, Cataluña habría logrado un ahorro de 198 millones por año.

Por su parte, fuentes de la Consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana aseguran que “el objetivo del déficit estaba en el 1’6 y hemos logrado 2’33”. “Hemos incumplido 7 décimas, pero eso sería una lectura muy superficial, pues hemos sido la comunidad autónoma que más ha contribuido a reducir el déficit de las autonomías en un 46’6 por ciento, que se deriva directamente del esfuerzo realizado en la Comunidad Valenciana”, añaden.

En cuanto a la eficiencia de los recursos, “somos a nivel presupuestario la segunda comunidad autónoma con el presupuesto más bajo per cápita y,  a nivel de gasto real, tenemos el gasto más bajo a nivel nacional. De esta manera, y haciendo grandes esfuerzos, hemos conseguido en tres años mantener las prestaciones sanitarias y,  gracias a los profesionales,  el gasto real ha pasado de los 7.121 millones de 2010 a 5.674 millones en 2013”, apuntan.

La Consejería de Hacienda de Castilla-La Mancha ha asegurado, en referencia al dato de déficit de 2013, que “las cuentas de la región están en línea con el objetivo de estabilidad presupuestaria”.  “El Plan Económico Financiero de Castilla-La Mancha, aprobado por el Ministerio de Hacienda en el mes de diciembre, incluye la posibilidad de incluir medidas excepcionales, sin que esos hechos conlleven medidas de ajuste”, han señalado fuentes de la consejería a este diario.

En Aragón, Javier Campoy, ha tomado posesión recientemente como nuevo Consejero de Hacienda y Administración Pública en sustitución de José Luis Saz, que presentó su dimisión por el incumplimiento del déficit fijado para la comunidad en el 2013, lo que supone un desfase presupuestario de 254 millones de euros. Sin embargo, el Gobierno que lidera Luisa Fernanda Rudi solo reconoce 81 millones, derivados precisamente del gasto sanitario. El objetivo del nuevo consejero es mantener a salvo el gasto social, y está a la espera del informe de la Administración General del Estado para elaborar un plan económico que palie las últimas cifras.

En cuanto a Murcia, tras la elección de Alberto Garre como presidente autonómico se deduce que la intención de la nueva consejera de Sanidad, Catalina Lorenzo, no se desvía del todo de apretarse el cinturón en la medida en que sea posible con nuevas medidas de contención.

No en vano, el propio Garre anunció que había encomendado a Lorenzo la realización de un estudio para un estudio para que “revise la estructura de las grandes entidades, el Instituto Murciano de Acción Social (IMAS) y el Servicio Murciano de Salud (SMS), todo ello sin merma alguna de la calidad del servicio que tiene que recibir el ciudadano”.

Por último, el Departamento de Salud de la Comunidad Foral de Navarra aseguran no estar de acuerdo con los datos de incumplimiento ofrecidos por el Ministerio de Hacienda. Según señalan “sí se ha cumplido y el no cumplimiento que alega el ministerio se debe a la particularidad del sistema de financiación de Navarra”. Sobre la posibilidad de realizar nuevos ajustes en sanidad, desde el departamento que lidera Marta Vera subrayan que “no se plantean ajustes y menos en sanidad o bienestar social, que han sido los sectores menos afectados por los recortes llevados hasta el momento”.
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