Francisco José Sáez, representante del Foro de Atención Primaria, y José Carlos Lacasa Echeverría, presidente de AMAT.
Reducir el tiempo de baja de larga duración que muchos pacientes ven
sobredimensionado debido a las listas de espera para acudir al especialista. Este es el objetivo que persiguen desde el Foro de Atención Primaria y desde la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) asumiendo estos últimos la
realización de pruebas complementarias. Algo que sería de forma gratuita y, según los profesionales,
coste-eficiente para el Sistema Nacional de Salud (SNS), ya que la cuantía gastada en incapacidades temporales (IT) en Primaria ya
representa más que el gasto farmacéutico.
Ambas organizaciones se encuentran inmersas en el desarrollo de un
“documento de consenso” que presentarán tanto al Ministerio de Sanidad como al de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Con él explicarán las bondades económicas y asistenciales de aplicar una batería de medidas, entre las que destacan la
realización de pruebas diagnósticas a través de la mutua y un
acceso bidireccional a la historia clínica elaborada del facultativo de Familia y de la mutua.
“El objetivo
en 2023 es que nos dejen pedir estas pruebas diagnósticas a través de la mutua para permitir que el paciente tenga esa prueba de forma temprana y sirva para orientar su situación.
Así se puede disminuir el tiempo de baja”, reclama Francisco José Sáez, miembro del Foro de Atención Primaria, entidad que reúne a las ocho principales entidades del primer nivel asistencial.
Una disminución que responde a un
ahorro económico. “Es difícil que los profesionales sanitarios que no dan bajas lo entiendan, y siempre se sorprenden cuando lo contamos, pero en Atención Primaria gastamos más dinero público en pacientes que están de baja laboral que en farmacia. Sin embargo, la supervisión es que se ajuste la farmacia para que no haya gasto porque ese dinero sale del Ministerio de Sanidad, mientras que el coste de una baja laboral corre a cargo del Ministerio Seguridad Social”, argumenta el especialista.
Beneficios de derivar las pruebas a la mutua
Según aseguran desde el Foro de Atención Primaria, la situación actual está derivando en un alargamiento innecesario de las IT. “Por ejemplo, un paciente que tiene una lumbalgia y está repetida y lleva un tiempo con un tratamiento que ya le hemos quitado. En este caso, sería necesario hacer una resonancia para valorar la situación que tiene esa espalda. Desde el SNS tenemos la obligación de derivarle al traumatólogo, pero
la lista de espera es grandísima”.
Esta derivación implica, según el especialista, tener al paciente con dolor y de baja hasta dentro de cuatro o cinco meses cuando el traumatólogo lo vea y le pida la resonancia para tres o cuatro meses después.
“Al final estamos entre ocho y diez meses que el paciente está con el dolor y si nos permitieran hacer algún tipo de actuación
podríamos hacerle un diagnóstico antes”, reivindica el facultativo.
En ese sentido, las mutuas se ofrecen a hacer esta resonancia magnética de
manera gratuita para el ciudadano y que el médico de Familia acceda a esa información, permitiendo adelantar el diagnóstico y una mejora del tratamiento que
erradicaría la dilatación en el tiempo de las IT.
Una medida desechada en el pasado
Esta petición se plasmará en un acuerdo que “está prácticamente hecho”. Sin embargo, en el pasado el Ministerio de Sanidad ya rechazó implementarla. “El problema que tiene esto es que cuando se planteó hace años se puso algún problema por parte de Sanidad porque consideraba que era
un trato especial para el paciente que está de baja, ya que tendrían un diagnóstico más temprano que el resto”, recuerda Sáez.
Pese a ello, tanto AMAT como Primaria consideran que ahora hay más opciones de que se lleve a cabo. “Años después
podría volver a replantearse porque que el gasto económico en IT es muy alto. La idea es llegar a un acuerdo de AMAT y el Foro de Atención Primaria y con ese documento plantearlo a Sanidad y Seguridad Social, que es el que asume esto y sería más razonable”, desvela el facultativo.
En ese sentido, Sáez considera que se trata de una cosa “sencilla” que puede repercutir en los ciudadanos:
“Alguna comunidad autónoma ya lo está haciendo. Por ejemplo, en Cataluña los médicos de Familia están derivando al paciente en baja laboral a rehabilitación de la mutua y se está acelerando su rehabilitación. En el hospital público generaría más problemas”.
Comunicación entre Familia y Trabajo
La otra medida que busca disminuir el tiempo medio de baja laboral actual es un aumento de la comunicación interprofesional entre el médico de Familia y el médico de la mutua de trabajo. Algo que pasa por un acceso bidericcional a sus respectivas historias clínicas del paciente.
“Hay una falta de comunicación con los médicos de las mutuas. El de Familia lo que recibe es un comunicado del inspector del SNS contándole la petición del médico de la mutua para pedir el alta de un paciente. No hay ningún otro tipo de contacto y tampoco te puedes dirigir al compañero de la mutua explicándote por qué das un parte de baja o no.
Es una sensación extraña”, explica Saéz.
Para el Foro de Atención Primaria “sería bueno” que los médicos de la mutua tuvieran acceso a la historia clínica. “De esta manera, tanto si se da de baja o no por accidente laboral, se puede pedir una comunicación y evitamos la
situación tensa a la que estamos llegando ahora debido al inmenso gasto presupuestario que han tenido las mutuas por el covid y que ha derivado en una
actuación de dar muy pocas bajas laborales con situaciones que sorprenden y no se llegan a entender”.
Para el facultativo, la situación actual es kafkiana: “Hemos llegado a un punto donde el médico de la mutua le ha dicho al paciente que le diga al de Familia que le dé un informe sobre la patología que tiene o en Familia le dicen que vaya al médico del Trabajo para que le dé un informe del accidente que tuvo hace tiempo.
Lo lógico sería ser más transversal”.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.