Javier García, presidente de Facme.
Después de que el
Gobierno de España decidiera incorporar a más de medio centenar de asesores científicos a la Administración General del Estado a través de la creación de la figura de
un asesor científico, la Federación de Asociaciones Científico Médicas (
Facme) se ha convertido en la puerta de entrada para generar un hilo conductor de conocimiento entre los diferentes ministerios y las Sociedades Científicas. Este nuevo papel de Facme es visto por su presidente,
Javier García, como un salto de calidad que permite a España “acercarse a países que están en la
vanguardia científica como son Estados Unidos, Japón, Reno Unido o Canadá. Considerar
aspectos científicos en cualquier iniciativa permite ofrecer decisiones políticas con fundamento”.
Así pues, uno de los ministerios que se verá nutrido y aconsejado por el conocimiento científico sanitario es el de Sanidad. El presidente de Facme considera a
Redacción Médica que “esta conexión permitirá que las
Sociedades Científicas se acerquen más a la administración pública y conozcan de
primera mano cómo funcionan sus procedimientos, como es el hecho de justificar fondos, acceder a fondos europeos, etc.”.
Con la confección de la nueva
Oficina Nacional de Asesoramiento Científico del Gobierno, García apuesta fuerte por la investigación y el análisis de datos de las administraciones públicos: “En nuestro tiempo se está creando una
cantidad ingente de información que no se explota de manera apropiada a nivel de sanidad. Tomar decisiones con
un análisis de Big Data o Inteligencia Artificial es fundamental”. Para el especialista, dar un papel representativo a la ciencia “es un elemento estratégico para España”.
"Se está creando una cantidad ingente de información que no se explota de manera apropiada a nivel de sanidad"
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García pone como ejemplo el
enorme papel que tiene la ciencia en una situación vivida no hace muchos años, como es la pandemia: “Este escenario puso en aprietos a la humanidad y han sido los científicos de distintos campos los que permitieron afrontarla, combatiéndola y
minimizando al máximo los riesgos gracias a epidemiólogos, inmunólogos y gestores sanitarios”. El presidente de Facme saca una lectura positiva de la
pandemia, reconociendo que “mejoró el prestigio social de la ciencia. Va a haber más pandemias con mayor o menor potencia y España debe estar preparada para ello”.
El papel que puede otorgar la ciencia en los problemas sanitarios
Este diálogo más cercano que se crea con las
administraciones públicas sanitarias y la ciencia a través de la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico del Gobierno permitirá, tal y como defiende el presidente de Facme, hacer frente a los nuevos retos sanitarios que ya están afectando a la población hoy en día, como son “
la contaminación ambiental, el
cambio climático, los
aspectos nutricionales de la actual alimentación o las
resistencias bacterianas”.
Con este nuevo compromiso del Gobierno de España, García espera que en caso de que el
Ministerio de Sanidad “necesite hablar de cáncer, enfermedades cardiovasculares, respiratorias, nutricionales, etc. Se dirija a los expertos en estos campos, que se encuentran entre las
46 Sociedades Científicas que conforman Facme”.
"Facme debe seguir siendo la encargada de ofrecer este conocimiento a las autoridades sanitarias y se espera que así sea"
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En su día, Facme ya fue un aliado del ejecutivo central durante la pandemia, tal y como recuerda el especialista: “En el momento en que se tuvo que tomar
decisiones políticas durante la pandemia basadas en la evidencia científica, se nos pidió muchas veces un posicionamiento respecto a las vacunas o la
priorización de los grupos de riesgo. Ahora, Facme debe seguir siendo la encargada de ofrecer este conocimiento a las autoridades sanitarias y se espera que así sea”.
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