Benzodiacepinas, hipnóticos, opiáceos, antidepresivos y antihistáminicos pueden alterar la conducción



9 jul. 2014 13:14H
SE LEE EN 2 minutos
Redacción. Madrid
La Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (Sefac), la Sociedad Española de Medicina de Tráfico (SEMT) y la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), con la colaboración de Faes Farma, han elaborado un documento de consenso titulado 'Fármacos y conducción' que revela que un 5 por ciento de los accidentes de tráfico está relacionado con los efectos de los medicamentos, principalmente las benzodiacepinas, los medicamentos hipnóticos y los opiáceos, y también otro tipo de productos como los antihipertensivos, los antidepresivos y los antihistamínicos.

Jesús Gómez, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (Sefac) y José Luis Llisterri, presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen).

Según el escrito, un 25 por ciento de los fármacos que están autorizados en España puede interferir en la conducción. De hecho, esta cifra llega al 74 por ciento entre los cien más vendidos. En la mayoría de los casos el paciente desconoce el riesgo potencial y no ha recibido información específica sobre el efecto que el tratamiento le puede provocar cuando maneja un vehículo. Estos efectos son: somnolencia o efecto sedante, reducción de reflejos y alteración de la percepción de las distancias, hiperactividad, alteraciones oftalmológicas o de la audición, estados de confusión y aturdimiento, y alteraciones musculares como espasmos o calambres.

Se suma además el hecho de que cerca del 30 por ciento de los conductores está en tratamiento con algún fármaco (de estos, un 64 por ciento toma dos o más medicamentos de manera simultánea) y entre un 25 y un 30 por ciento de la población se automedica, lo que supone un factor de riesgo añadido para la seguridad vial. Por ello, el análisis recomienda evitar la polimedicación innecesaria y fomentar la adherencia a los tratamientos disminuyendo las pautas posológicas.

Personas mayores

Los conductores de edad avanzada constituyen, según el texto, una población en continuo aumento y un factor de riesgo para la seguridad vial al simultanear la toma de varios medicamentos. Para evitar accidentes innecesarios, el documento aconseja que los mayores conduzcan principalmente por calles conocidas, limiten sus viajes a lugares de fácil acceso y cercanos al hogar, eviten rampas de carreteras, giros a la izquierda, cruces con especial dificultad de coordinación, no conduzcan por la noche o con un clima desfavorable y contactar con su médico si se ve, o los familiares lo ven, incapacitado para conducir.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.