La directora de la Aemps, Belén Crespo.
La
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha incluido
sirolimus y everolimus como fármacos de estrecho margen terapéutico. En consecuencia, ambos
medicamentos pasan a formar parte de las excepciones al reemplazo por otro fármaco análogo en la botica (el de menor precio y mismo principio activo) conforme dicta la ley.
El
sirolimus es un medicamento inmunosupresor que se emplea para evitar el rechazo de órganos trasplantados, en especial para el caso del
riñón, en tanto que everolimus también se emplea como
inmunosupresor en la
terapia de trasplantes, indicación expresa para la que contempla la nueva condición de fármaco no sustituible.
Los laboratorios titulares de dos formas comerciales que contienen cada uno de estos principios activos (en concreto,
Rapamune para el sirolimus y
Certican para el everolimus) solicitaron a las autoridades sanitarias el reconocimiento de su condición de medicamentos de estrecho margen terapéutico (es decir, la dosis indicada para el tratamiento y la proporción que resulta tóxica o contraindicada están separadas por un rango muy pequeño).
Conforme publica este miércoles el boletín oficial del estado (BOE), el Departamento de Medicina de la Aemps ha concedido esta categoría a ambos compuestos. En adelante, por lo tanto, pasan a engrosar la lista de fármacos que los profesionales no pueden reemplazar por otro en caso de que no disponer de existencias suficientes, pese a que la fórmula y composición sean las mismas, ya que así lo contempla la normativa sobre uso racional de los medicamentos en su artículo 86, cuarto epígrafe.
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