Conforme se acercan las elecciones generales es inevitable, y muy tentador, hacer cábalas sobre candidatos y posiciones de salida de las principales figuras de los partidos. Aunque se trate del partido en el Gobierno, y aunque se haya asegurado desde el mismo, por activa y por pasiva, que ya hay un candidato natural y que es, cómo no, el actual presidente.
Pero siempre es buena ocasión para preguntar a figuras prominentes, por si hay ‘tapados’ en la carrera hacia la Moncloa. Es el caso de El País, que entrevista este domingo al ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo. En un momento dado, los autores del texto, Javier Casqueiro y Miguel González, preguntan al responsable de la diplomacia española por “el recambio de Rajoy”, en caso de que éste no gane las elecciones. Como es natural, García-Margallo no responde a la pregunta, pero los periodistas dan una serie de nombres y le piden que los valore en una palabra.
Entre los cuatro nombres figura el actual responsable de Sanidad, Alfonso Alonso, al que el ministro califica de “prometedor”. De los tres restantes destaca que sea “ordenada” (Soraya Sáenz de Santamaría), “brillante” (Alberto Núñez Feijóo) y “sólida” (Dolores de Cospedal). Estas preguntas y cábalas pueden no ser más que juegos, pero qué duda cabe de que Alonso, cuya imagen se está reforzando desde que asumió las responsabilidades sanitarias más altas, es reconocido como uno de los imprescindibles en el hipotético caso de una sucesión.