Redacción. Barcelona
La Federación Nacional de Clínicas Privadas (FNCP) ha criticado que los trabajadores de Barnaclínic “se vean obligados por contrato a ‘promocionar’ la oferta asistencial de su parte privada del Hospital Clínic entre los pacientes de la pública”, tal y como asevera en un comunicado en el que responden a las informaciones que apuntan en este sentido.
Cristina Contel.
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Según Cristina Contel, presidenta de FNCP, este modelo - Barnaclínic- es “perverso y desleal” porque “crea dentro de la propia sanidad pública una doble velocidad de acceso y de atención” y ha añadido que “perjudica gravemente la actividad de los centros sanitarios privados, al aprovechar instalaciones, equipamiento y profesionales del sector sanitario público para realizar actividad privada”.
Afirma también que se incurre en “competencia desleal”, ya que este modelo concurre con coste cero a fondos públicos sin asumir costes laborales, fiscales, de inversión y de riesgo empresarial con fondos propios.
A la espera de la decisión de la Audiencia Provincial
La presidenta de la patronal, también a la cabeza de la Asociación Catalana de Entidades de Salud (ACES), ha recordado que desde la patronal catalana se interpuso una demanda contra Barnaclínic, que el Juzgado Mercantil 7 de Barcelona desestimó en primera instancia. ACES recurrió la decisión ante la Audiencia Provincial alegando que se ha dado una vulneración de la Ley 15/2007 de Defensa de la Competencia y de la Ley 3/91 de Competencia Desleal, y aún esperan la resolución.
Además desde la patronal recuerdan que “anteriormente ya se habían producido actividades dudosas como aprobar la compra del 100 por cien de las acciones de Barnaclínic por parte del Hospital Clínic o el cambio apresurado de estatutos para blindar la actividad privada que realiza”.
“En cualquier caso, no tiene mucho sentido que por un lado se estén sacando centros privados del sistema, cuando los beneficios de la colaboración público-privada están más que probados y por otro, se esté extendiendo la creación de divisiones privadas dentro de los centros públicos que constituyen una ‘privatización al margen de la sanidad privada’, lo que afecta directamente a las empresas, a sus trabajadores y a la población en su conjunto, al utilizarse los impuestos para financiar instalaciones y equipamientos que concurren con las empresas sanitarias privadas”, afirman desde FNCP, que engloba a 500 centros sanitarios de toda España.
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