El plan de renovación tecnológica del Sergas se adjudicará en marzo

Redacción. Santiago de Compostela
El nuevo plan tecnológico del Servicio Gallego de Salud (Sergas) estará adjudicado en marzo de este año y los contratos se formalizarán en abril si se cumplen las previsiones que maneja su gerente, Antonio Fernández-Campa, quien ha ratificado, como ya había avanzado el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, que se priorizará equipar el nuevo hospital de Vigo y cumplir con el compromiso de radioterapia y medicina nuclear en Lugo.

Fernández-Campa.

En un desayuno con la prensa, en el que estuvo acompañado por la subdirectora de Compras, Paula Camba, y por el subdirector de Ordenación Asistencial e Innovación Organizativa, Julio García Comesaña, Fernández-Campa ha defendido el nuevo plan tecnológico del Sergas, licitado por 88 millones de euros, y ha explicado su procedimiento de contratación, el de “diálogo competitivo” con las empresas.

Según ha explicado, este sistema incluye la “posibilidad reglada” de dialogar con las empresas durante el periodo de licitación, con la intervención de varios órganos que analizan las propuestas y elaboran los pliegos con las condiciones que deben incorporar los equipos tecnológicos.

Lo que se contrata es “la disponibilidad” de los equipos, de forma que durante los ocho años que dura el contrato, las concesionarias deben garantizarla y se incluye la posibilidad de penalización en los ingresos si esto no ocurre, pero también el mantenimiento y la renovación de la tecnología, la formación del personal y un software igual para todos independientemente del hospital y su rendimiento.

Si Feijóo había señalado que los nuevos aparatos tecnológicos se instalarían a lo largo de 2015 y 2016, Fernández-Campa ha concretado más los plazos, que se ajustarán a las características de cada equipo. Confía en cumplir los plazos previstos en 2015 para la radioterapia y la medicina nuclear del Hospital Universario Lucus Augusti (HULA), así como para la puesta en marcha del nuevo hospital de Vigo.

De los 88 millones que se sitúan como importe máximo de licitación, el primer lote tecnológico (diagnóstico por imagen y medicina nuclear) supone aproximadamente el 63 por ciento del coste, mientras que el segundo de intervencionismo guiado por imagen cardiológica, el 6 por ciento, y el de radioterapia, el 31 por ciento restante.