"La tecnología sanitaria requiere un apartado dentro del plan de industria"

El Plan Estratégico de la Industria Farmacéutica que está llevando a cabo el Gobierno de España está en el punto de mira de varios sectores, como el de Tecnología Sanitaria, que pide estar presente en él. Así lo considera Jorge Huertas, presidente de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), en su primera entrevista en Redacción Médica desde que ocupó este puesto.

"La tecnología sanitaria debe recogerse en el plan de industrialización. Esto servirá para crear puestos de empleo cualificados, retener talento en el país, trabajar en innovación e I+D y promover un modelo de industria 4.0", señala Huertas.

En otro orden de cosas, el presidente de la Federación también analiza en esta entrevista cómo está siendo la aplicación de la norma para productos in vitro, condicionada por "el número de organismos notificados y su capacidad"; y la necesidad de planificación a la hora de implementar el Perte de Salud de Vanguardia.

Además, Huertas señala que el Plan de Inversiones en Equipos de Alta Tecnología (Inveat), que pretende renovar el parque tecnológico español y mejorar la equidad y el acceso al mismo, es "un éxito", pero no puede "quedarse ahí": "Necesitamos programas continuos que nos aseguren que tenemos un mecanismo de actualización de tecnologías sanitarias", sostiene. Por último, aborda la crisis de suministros y el incremento de costes que están sufriendo las compañías del sector y apunta como posibles soluciones la eliminación de aquellas cláusulas en la normativa nacional que impiden la indexación de los contratos públicos y la aplicación de IVA reducido en los productos sanitarios.

Entrevista completa de Jorge Huertas, presidente de Fenin.

¿Cómo afronta esta nueva etapa como presidente de Fenin?

Con mucha ilusión y compromiso. Hace casi diez años que estoy en la Junta Directiva y mi llegada a la presidencia es un honor, pero también una responsabilidad. Ya estamos trabajando con el equipo para crear valor para nuestros asociados y para los pacientes. 

¿Qué objetivos se ha marcado a corto, medio y largo plazo?

Nuestros objetivos permanentes son el diálogo con las Administraciones, tanto con las comunidades autónomas como con la central, y que prime la cooperación público-privada. Este año está marcado por las elecciones y, por ello, a corto plazo estamos trabajando en las prioridades que, como sector, nos gustaría que estuviesen recogidas en los programas electorales de todos los partidos. En la línea de defender la tecnología sanitaria como un conjunto de empresas que prestamos ayuda para tratar a los pacientes. En ese sentido, a corto-medio plazo, es importante para nosotros que los partidos tengan en sus programas mecanismos que nos ayuden a garantizar la sostenibilidad y el suministro de las empresas en época de crisis y de costes elevados. 

Asegurar esta continuidad significa tener explícitamente cláusulas de indexación en los contratos públicos, que se atienda la propuesta de la reducción del IVA para los productos sanitarios y que se incluyan programas de industrialización para la Tecnología Sanitaria, que es un sector estratégico y esencial para la economía española. Por otro lado, a largo plazo, nos focalizamos en la digitalización y modernización del sistema sanitario a través de las tecnologías de salud. Todo ello con la voluntad de tener un sistema que sea más eficiente y más sostenible. 

¿Cómo están haciendo frente las empresas de tecnología sanitaria al impacto de la crisis de suministros y al incremento de costes?

Con mucha dificultad porque el 2022 ha sido duro y el inicio del 2023 también. Aunque es cierto que las empresas hemos aprendido mucho de la pandemia del Covid-19 y todas las compañías han puesto en funcionamiento planes de contingencia para trabajar de la manera más eficiente posible en sus cadenas de suministro, tanto para importar productos como componentes. Tratamos de vencer todas las adversidades que tenemos últimamente. 

"Con los niveles actuales de inflación y las cláusulas que impiden la indexación de los contratos públicos, las empresas de tecnología sanitaria tienen unas tensiones importantes para hacer frente a todo ello", explica Huertas.

¿Están en conversaciones con Sanidad para la puesta en marcha de forma urgente de un plan de choque para el Sector? ¿Qué debe contemplar?

Por un lado, apostamos por la eliminación de las cláusulas que impiden la indexación de los contratos públicos, ya que hace unos años en la Ley de Contratación del Sector Público, se puso una cláusula que prohíbe que los contratos puedan estar indexados. En periodos de baja inflación, cuando estaba al 2 por ciento era asumible, porque al final las compañías tenían que generar una productividad anual equivalente a eso. Sin embargo, en los dos últimos años tenemos unos niveles altos de inflación que, previsiblemente, se alargarán otros dos o tres años y esto ya está generando unas tensiones muy importantes en nuestras compañías.

Por otro lado, pedimos que las compañías no tengan penalizaciones si no son capaces de hacer frente a sus compromisos contractuales por esa crisis de suministros. Tenemos empresas que tienen dificultad en recibir los productos que importan y distribuyen en el mercado y no pueden cumplir con sus contratos.

¿Cómo está siendo la adaptación a la normativa in vitro? ¿La falta de organismos notificados merma esta adaptación?

Desde el sector apoyamos la nueva norma para productos in vitro que ha marcado Europa, pero el elemento más limitante que tenemos a día de hoy, como ya reconoció la UE hace más de un año, es el número de organismos notificados que tenemos y la capacidad de los mismos. Esto está generando un retraso en el proceso de adaptación. 

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"Necesitamos planes continuos de actualización de tecnologías sanitarias de más de 11-12 años"

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¿Cómo va la aplicación del Plan Inveat? ¿Es suficiente o debería plantearse una segunda edición?

Con el Plan Inveat se aprobaron 851 equipos y a cierre del año pasado ya se habían adjudicado 674. Tenemos hasta septiembre de este año para llegar a su totalidad, así que a este ritmo vamos bien. El problema puede estar en la obra asociada a estos equipos porque al ser de alta tecnología a veces es compleja la instalación. En ocasiones se necesita la intervención del Consejo de Seguridad Nuclear y hay más retrasos.

Es un programa muy exitoso que nos va a ayudar a atajar un problema que tenemos con los equipos de alta tecnología, pero no se puede quedar ahí. Necesitamos planes continuos que nos aseguren que tenemos un mecanismo de actualización de tecnologías sanitarias de más de 11-12 años. Además, el Ministerio de Sanidad ha anunciado otro plan de renovación dedicado a Atención Primaria (AP). Tenemos pendiente conocer los detalles sobre cómo se va a plasmar. 

¿Cómo está siendo la ejecución del Perte de Salud de Vanguardia?

Es un elemento clave de cara a la modernización de nuestro sistema de salud en el futuro. La planificación y nuestra participación son importantes para que podamos hacer una cadena de transmisión con nuestras empresas del sector ya que luego los plazos de implementación son complejos.

El presidente de Fenin señala que la 'Guía de Compra Pública Eficiente del Sector de Tecnología Sanitaria' debe estar "viva y evolucionar" para lograr una mejor contratación basada en valor.

Hace unas semanas publicaron la 'Guía de Compra Pública Eficiente del Sector de Tecnología Sanitaria'. ¿Se trata de un documento clave para la compra te tecnología sanitaria?

Se trata de una guía para ayudar a los organismos que compran tecnología sanitaria teniendo en cuenta sus características. La Ley de Contratación del Sector Público es muy genérica y no tiene un capítulo específico para nuestro sector y, por ello, con este documento hemos intentado acercar las características de esta norma a nuestros productos. Ha sido elaborada con la colaboración de expertos en contratación pública de la mayoría de las comunidades autónomas, por lo tanto, es un documento de consenso. Además, queremos que sea vivo, que evolucione y que sirva para hacer una mejor contratación, en la línea de una compra pública basada en valor. 

¿Qué es lo que consideráis que no puede faltar en el Plan Estratégico de la Industria?

Este plan de industrialización debería acordarse del sector de Tecnología Sanitaria y tener un punto concreto para ella. Durante la pandemia del Covid-19 hemos visto las limitaciones que tenemos, ya que una parte de la tecnología tuvimos que traerla de fuera de nuestras fronteras. Por lo tanto, debe recogerse al sector y que esto nos sirva para crear puestos de empleo cualificados, retener talento en el país, trabajar en innovación e I+D y promover un modelo de industria 4.0. 

"El IVA reducido en productos sanitarios ahorraría más de mil millones de euros al Sistema Nacional de Salud que podrían usarse para comprar más tecnología sanitaria", concreta Huertas.

¿En qué consiste el programa de polos tecnológicos de Fenin?

Tratamos de encontrar oportunidades para la generación de industria de tecnología sanitaria. Lo hacemos de varias maneras, por ejemplo, con procesos de matchmaking por comunidades autónomas, el año pasado estuvimos en País Vasco, Asturias y la Comunidad de Madrid y este año iremos a otras. El programa consiste en identificar startups que están empezando en el desarrollo de productos de tecnología sanitaria y hacemos sesiones en las que les ponemos en contacto con empresas. Así se convierten en partners de esas compañías emergentes o incluso en compradores. Trabajamos también con las administraciones de esas CCAA para el desarrollo de ecosistemas de innovación que potencien una industria de alto valor añadido.

Una de sus peticiones es la aplicación de un IVA reducido a los productos sanitarios. ¿Han avanzado en este sentido? ¿Se han reunido con Hacienda para abordarlo?

Es otro de los retos importantes que tenemos en marcha y hemos intentado hablar con Hacienda para transmitirles esta idea. Europa aprobó la posibilidad de la reducción del IVA de los productos sanitarios hace un año y en España no se ha abordado, pero que si se hiciese, se ahorrarían cerca de mil millones de euros que los servicios de salud podrían utilizar para comprar más tecnología sanitaria y para atender a otras necesidades que tiene nuestro sistema. 

El presidente de Fenin concreta en qué consiste el programa de polos tecnológicos que lleva a cabo la Federación para acercar a startups con empresas del sector.