Test para detectar coronavirus.
La
disfunción del sentido del olfato y el gusto puede representar una vía distinta de recuperación de Covid-19 caracterizada por una
buena recuperación de otros síntomas relacionados con la enfermedad. Así lo ha demostrado un estudio reciente publicado en el servidor de preimpresión
medRxiv.
En él, investigadores austriacos realizan un análisis de múltiples cohortes para investigar la
resolución lenta de la disfunción olfativa, que a menudo acompaña a la enfermedad aguda por coronavirus y sus secuelas, y el
trastorno del gusto que lo provoca en pacientes hospitalizados y ambulatorios con la enfermedad por Covid-19.
La comunidad médica ha definido a grandes rasgos los síntomas persistentes relacionados con el Covid-19. Sin embargo, estas definiciones no caracterizan estos síntomas. La caracterización de los patrones de recuperación de Covid-19,
los síntomas persistentes, incluidos los trastornos del gusto y disfunción del sentido del olfato, y su carga, son cruciales para
identificar a los pacientes en riesgo que pueden beneficiarse de las terapias correctivas específicas.
¿Cómo se llevó a cabo el estudio?
Los investigadores del estudio se centraron en la
disfunción del sentido del olfato durante la recuperación de covid en el contexto de otros síntomas, calidad de vida, salud física y mental. Para ello analizaron la
trayectoria de recuperación clínica y psicosocial de los pacientes para después volver a analizar las observaciones y resultados de una encuesta publicada de pacientes con Covid-19 no hospitalizados y
otro estudio multicéntrico que tenía pacientes ambulatorios y hospitalizados utilizando algoritmos de agrupación y minería de asociación.
Los convalecientes ambulatorios de Covid-19, de Austria e Italia, participaron en la encuesta entre el 30 de septiembre de 2020 y el 5 de julio de 2021. Durante este tiempo
la variante Alfa del SARS-CoV-2 predominó en estas regiones. El equipo incluyó también en el análisis a pacientes con covid sintomático, con un
intervalo de más de 90 días entre el diagnóstico y la finalización de la encuesta. Los investigadores pidieron a los participantes que asignaran
42 síntomas a clases de duración predefinidas como covid agudo y prolongado.
El otro estudio incluyó a pacientes ambulatorios y hospitalizados con Covid-19 reclutados en Austria entre marzo y junio de 2020. El equipo registró prospectivamente
ocho síntomas, que incluyen actividad física reducida, hiposmia o anosmia, disnea, problemas para dormir, fiebre, tos, sudoración nocturna, y síntomas gastrointestinales
los días 60, 100, 180 y 360 después de Covid-19.
¿Qué resultados arroja la investigación?
Tanto en el colectivo ambulatorio como en la cohorte transversal ambulatoria y hospitalizada la disfunción del sentido del olfato autoinformada fue frecuente durante la fase aguda del Covid-19, mostró un
ritmo de recuperación lento y comúnmente coincidía con trastornos del gusto.
En el colectivo ambulatorio, se identificó un grupo de convalecientes predominantemente jóvenes, mujeres, sin comorbilidad, con deficiencia del sentido del olfato persistente y trastorno del gusto.
Este fenotipo de trastorno del olfato y del gusto postagudo se caracterizó por una
baja frecuencia de otros síntomas postagudos principales, como fatiga, molestias respiratorias y neurocognitivas.
A pesar de una disfunción prolongada del olfato y el gusto, este subconjunto tenía
altas calificaciones de rendimiento físico, salud mental y calidad de vida. No obstante, los autores destacan como principal conclusión que los resultados subrayan la
heterogeneidad clínica de las secuelas postagudas de Covid-19 que requieren
estrategias de manejo personalizadas.
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