El IPC sigue desbocado en España entre dudas de su evolución en sanidad

España se mantiene sumergida bajo una ola inflacionista que en el mes de julio ha alcanzado un incremento del 10,8 por ciento interanual, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata del nivel de IPC más elevado desde el año 1984, aunque paradójicamente este fenómeno no está alterando de forma significativa la evolución de los precios sanitarios.

De hecho, el último informe del INE sobre el encarecimiento de los precios vinculados al sector sanitario reflejó un incremento cercano al 0 por ciento, un dato que contrasta con la tendencia alcista del IPC nacional.

Lo cierto es que los precios de productos farmacéuticos y los instrumentos médicos apenas han variado durante los dos últimos meses analizados. En abril, el incremento del IPC armonizado fue del 0,2 por ciento, tasa que cayó hasta casi el 0 tanto en mayo como en junio. El índice se sitúa en los 104,43 puntos, un dato sin precedentes en el registro histórico.

Aumento de la inflación en España

En cualquier caso, son datos que se alejan mucho de la tendencia nacional. Según el avance que ha hecho público este viernes el INE, el IPC se redujo dos décimos en julio en relación al mes anterior pero se disparó hasta el 10,8 por ciento en términos anuales.

De este modo, la inflación encadena tres meses consecutivos de ascensos en su tasa interanual después de que en abril se moderara 1,5 puntos hasta el 8,3 por ciento. En mayo escaló hasta el 8,7 por ciento, y en junio superó los dos dígitos (10,2 por ciento), algo que se vuelve a repetir en julio.

Según el INE, la escalada del IPC interanual hasta el 10,8 por ciento se debe, principalmente, a la subida de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas y de la electricidad (la cual registró una bajada en julio de 2021) y al comportamiento del vestido y calzado, cuyos precios bajan menos que el año pasado.