Redacción. Sevilla
La esquizofrenia, y en concreto los episodios psicóticos son uno de los principales temas que se están tratando en el XVII Congreso Nacional de Psiquiatría, que se celebra en Sevilla hasta el sábado 28 de septiembre. Miquel Bernardo, presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB) ha puesto de relieve que “alrededor del 3 por ciento de la población general sufre un episodio psicótico a lo largo de su vida”.
Miquel Bernardo, presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB). |
El primer episodio psicótico (PEP) suele ocurrir entre los 15 y los 30 años, siendo más temprano en los varones. “La aparición precoz se asocia con una mayor carga genética, un deterioro cognitivo grave y una peor evolución y pronóstico”, asegura Bernardo, quien recalca que en el origen de los trastornos psicóticos “los factores genéticos y ambientales desempeñan un papel clave; sin embargo, los estudios existentes no evalúan la contribución de la interacción entre los genes y el ambiente”.
En este sentido, hay familias con varios individuos afectados o los estudios con gemelos monocigóticos. “De hecho, la heredabilidad de la enfermedad se estima en torno al 80 por ciento, con mayor prevalencia de la patología cuanto mayor sea la carga genética compartida con el familiar afectado”, afirma el presidente de la SEPB.
Asimismo, en los pacientes con un diagnóstico de psicosis no afectiva reciente, “se han descrito un número considerable de anormalidades cardiovasculares y metabólicas, antes de iniciar tratamiento con medicación antipsicótica, lo que supone una esperanza de vida más corta.” Todo ello provoca que la evolución clínica después de un PEP “suele ser hacia un cuadro crónico y variable” lo que supone un elevado coste para la sociedad, ya que, en Europa, representa el 11,2 por ciento de la carga mundial de las enfermedades cerebrales.
También ha señalado Miquel Bernardo que “la remisión completa solo se produce en un tercio de los pacientes. Hasta un 80 por ciento de los pacientes sufre una recaída en los cinco años siguientes al PEP, con un riesgo importante de presentar, además, resistencia al tratamiento”.
Proyecto PEP
En el Congreso se han presentado los primeros datos del llamado Proyecto PEP, cuyo principal investigador ha sido Miquel Bernardo. Se ha estudiado la interacción entre genes y ambiente en los primeros episodios psicóticos, arrojando unos resultados que “abren nuevas puertas a la esperanza para los pacientes con esquizofrenia”, ya que “ha permitido identificar factores de riesgo genéticos y ambientales y su interacción en la aparición de un primer episodio psicótico, en orden a desarrollar estrategias más efectivas de tratamiento y prevención de recaídas”.
Este proyecto ha contado con la financiación del Fondo de Investigaciones Sanitarias (FIS) “y en él han participado 16 centros de investigación consolidados de toda España y se ha coordinado desde la Unidad de Esquizofrenia del Hospital Clínic de Barcelona”.
Javier Álvarez, cuarto por la izquierda, junto con los protagonistas de El Camino de la Esquizofrenia |
Miquel Bernardo ha señalado igualmente que “existen un total de 357 marcadores biológicos asociados a la esquizofrenia ya detectados en investigaciones anteriores. Así, actualmente se está trabajando en la validación de procedimientos de diagnóstico (test) de la esquizofrenia a partir únicamente de marcadores biológicos, lo que nos permitiría diagnosticar una ‘esquizofrenia latente’ incluso antes de que se produzca el primer episodio psicótico. Esto nos proporcionaría no solo una herramienta de enorme valor diagnóstico, sino también, de enorme valor preventivo”. “En un futuro cercano, estos test de biomarcadores se incorporarán a nuestra rutina asistencial, para ayudar a los psiquiatras a tomar decisiones en cuanto a diagnóstico y tratamiento”, ha señalado.
‘El Camino de la Esquizofrenia’
En el marco del Congreso también se ha proyectado la película “El Camino de la Esquizofrenia”, así como un coloquio posterior con los protagonistas de la misma. Tal y como ha explicado Javier Álvarez Rodríguez, jefe de Servicio de Psiquiatría del Complejo Asistencial Universitario de León, “la película recoge la convivencia de cinco pacientes esquizofrénicos crónicos del Área de León que, acompañados por cuatro terapeutas, realizan varias etapas del Camino de Santiago a lo largo de una semana”.
La finalidad inicial y primordial de la película “es la de contribuir a acabar con el mito de que el enfermo esquizofrénico es peligroso en sí mismo, pudiendo reaccionar de forma hetero-agresiva grave en cualquier momento y de forma inesperada, creencia todavía muy arraigada, no sólo en la población en general, sino también entre los profesionales de la sanidad”.