Las estrategias para poder
detener el coronavirus no se detienen. Mientras que aún se debaten los efectos de las primeras vacunas contra el virus, las técnicas de manipulación de anticuerpos son una alternativa que va teniendo resultados prometedores. Es el caso de un
estudio publicado en
BioRxiv el cual señala que la administración intranasal de anticuerpos humanos modificados en fosas nasales de ratones bloquea la infección provocada por el virus SARS-CoV-2.
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La
prevención de la infección por SARS-CoV-2 en el punto de entrada nasal es una estrategia novedosa que tiene el potencial de ayudar a contener la pandemia en curso. "Utilizando nuestras tecnologías patentadas, hemos diseñado un
anticuerpo humano que reconoce la proteína de pico SARS-CoV-2 S1 con una afinidad mejorada por la mucina para mejorar la retención de anticuerpos en la mucosa respiratoria", explican los investigadores del estudio.
La investigación demostró que el anticuerpo modificado, cuando se administra en las fosas nasales de los ratones,
bloquea la infección que fueron expuestos a títulos altos de pseudovirus SARS-CoV-2, 10 horas después del tratamiento inicial con anticuerpos. "Nuestros datos muestran que la protección contra la infección por SARS-CoV-2 es eficaz en las áreas nasal y pulmonar 7 días después de la exposición viral. El anticuerpo modificado es estable en una formulación de aerosol nasal y mantiene su actividad neutralizante del SARS-CoV-2", detalla la publicación.
En los seres humanos,
la IgA es el principal isotipo de anticuerpo secretado en las vías respiratorias superiores, "su presencia allí se correlaciona con la resistencia a la infección por virus respiratorios. Entrega de anticuerpos a la superficie de la mucosa de las vías respiratorias superiores, imitando los anticuerpos secretados naturalmente, puede evitar que el virus alcanzar su objetivo o neutralizar directamente el virus infeccioso, y puede ser una estrategia útil para profilaxis", explican los investigadores.
En esta línea, el estudio ha demostrado que los anticuerpos protegen el tracto respiratorio. de la infección viral cuando se administra de forma profiláctica. "Mientras que los anticuerpos IgA secretores son más eficientes que los anticuerpos IgG para proporcionar una protección viral eficaz, los anticuerpos IgG tienen una modalidad bien establecida para la fabricación y caracterización a gran escala, las cuales son esenciales para proporcionar una fuente asequible y escalable de
anticuerpos para un profiláctico", argumentan los autores del estudio.
Modificación de los anticuerpos IgA
Los investigadores plantearon la hipótesis de que si los
anticuerpos IgG pueden modificarse para unirse a la mucina, sus vidas medias en la mucosa y la protección contra la infección viral podría ampliarse.
"Aquí mostramos que una molécula de IgG de anticuerpo contra el SARS-CoV-2 con un dominio Fc modificado genéticamente ha mejorado significativamente la afinidad de unión a la mucina. El anticuerpo modificado conserva su alta afinidad de unión a su antígeno diana (proteína de pico S1 de SARS-CoV-2) y tiene actividad neutralizante contra la infección viral del SARS-CoV-2. El anticuerpo IgG modificado mostró una potencia mejorada como en comparación con el anticuerpo no modificado para bloquear la infección viral en un ensayo basado en células. Más de manera importante, se demostró que el anticuerpo IgG modificado protege a los ratones transgénicos de hACE2 de la infección por pseudovirus SARSCoV-2 cuando se administra por vía intranasal. Esta protección duró al menos 10 horas incluso a las concentraciones de anticuerpos más bajas probadas", sentencian los autores del estudio.
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