Ciencias de la Salud se perpetúa como la rama con más brecha salarial

La brecha salarial entre hombres y mujeres en Ciencias de la Salud es la mayor dentro de las ramas universitarias, a pesar de que en todas ellas es elevada. El análisis por áreas de enseñanza en las universidades españolas revela que las sanitarias son las que representan la mayor distancia en cuanto a sueldos entre hombres y mujeres, con un 18 por ciento, seguido de otras tres ramas en las que se sitúa por encima de 12,7 por ciento, valor generalizado que ha revelado el Estudio de Brecha Salarial de Género de 2023, publicado por el Ministerio de Igualdad. Todo ello, cuando las mujeres representan más de la mitad en esta rama de enseñanza el 52,9 por ciento dentro del PDI. 

Por otro lado, la brecha salarial por género (BSG) es reducida en el salario base, pero en todas las ramas se muestran valores medios o altos. De nuevo en este caso, las Ciencias de la salud representan la distancia más elevada, con un 27,4 por ciento, seguido de las Ciencias (19,4 por ciento). 

La tendencia generalizada de ese BSG en los diferentes complementos es homogénea dentro de las ramas de enseñanza. Sin embargo, la tendencia a que la mayor brecha salarial se produce dentro de la rama sanitaria en las universidades también es constante. 

No obstante, si nos centramos en el complemento por sexenios, el valor medio para Ciencias de la Salud es muy elevado (casi un 40 por ciento) y especialmente reducido en Ingeniería y Arquitectura (5,5 por ciento). Esto muestra que aunque se trata de un área de enseñanza feminizada, el desequilibro en el número medio de sexenios obtenido es grande. 

Diferencias entre hombres y mujeres y brecha salarial

A pesar de las diferencias que hay entre categorías profesionales, en total dentro de esta rama hay 12,604 mujeres por 11.212 hombres dentro de las universidades españolas. 

Cabe resaltar que el profesor asociado en Ciencias de la Salud tiene más relevancia y supone el 59,4 por ciento del total. Es decir, el 60 por ciento de las profesoras se encuentran dentro de esta categoría, y el 10,6 por ciento son titulares en la universidad. El 3,8 por ciento de las mismas son catedránticas, bastante más reducido que el porcentaje de hombres (9,7 por ciento). 

En este caso, la presencia de hombres y mujeres en términos generales es similar, pero existen categorías que están masculinizadas, como es el caso más representativo: el de los profesores eméritos. Constituyen un 88,4 por ciento del total. Esto también sucede en los catedráticos de univerisdad y de escuela universitaria (69,6 por ciento y 63,4 por ciento respectivamente). 

Sin embargo, estos datos se equilibran con la elevada proporción de mujeres que están en el personal investigador, que consituyen más de un 60 por ciento del personal investigador predoctoral y el 65,6 del postdoctoral.