El PP pide 'criba' del Congreso al director de la Agencia de Salud Pública

Las enmiendas del PP al proyecto de creación de la Agencia Estatal de Salud Pública llegan hasta su misma denominación, pues pretende incluir la coletilla ‘y Evaluación de Políticas Sanitarias’. No es baladí el añadido que propone la formación conservadora, que, en efecto, reclama que este órgano analice cómo se implementan las decisiones de salud que adopten las administraciones. Además, aboga por que el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Sanidad, designe a un presidente que deberá demostrar “su experiencia, formación y capacidad” ante el Congreso de los Diputados y el Senado. Serán las Cortes Generales las que ratifiquen este cargo. Por su parte, Vox también ha dejado caer sus correcciones y ha añadido enmiendas que se podrían considerar más 'técnicas'.

En la batería de enmiendas que ha registrado el PP en el Congreso, a la que ha tenido acceso Redacción Médica, los populares llaman a renombrar este órgano como Agencia Estatal de Salud Pública y Evaluación de Políticas Sanitarias (AESAPEPS), que asumiría el desarrollo y ejecución de las funciones técnicas del Ministerio de Sanidad en materia de vigilancia en salud pública.

Proponen, además, que la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (cuya reforma habrá de acometer la propia Agencia) ponga el foco también sobre la zoonosis y las enfermedades emergentes entre las patologías transmisibles a vigilar, además de incorporar las no transmisibles, lesiones, otros condicionantes de la salud, sus determinantes sociales y las inequidades.

De forma paralela, el PP recoge en sus enmiendas que la Agencia “realizará la parte correspondiente a la evaluación del riesgo para la salud humana de los biocidas y los fitosanitarios”, correspondiendo la gestión, autorización y registros “a los departamentos ministeriales competentes”. “Asimismo, evaluará los riesgos derivados del uso y comercialización de sustancias y mezclas químicas y la identificación de sus efectos peligrosos en la relación con la salud humana”, añade.

En este sentido, defiende que el organismo evalúe “la implementación de políticas sanitarias en el conjunto del sistema”, coordinándose para tal fin con las comunidades autónomas y los agentes que conformen el sector y haciendo públicos los resultados de su trabajo “para favorecer las mejores prácticas y promover la excelencia”.

Un presidente de "experiencia y prestigio"

En una propuesta de disposición adicional, los conservadores reclaman que la Agencia Estatal de Salud Pública esté dirigida por un presidente “de reconocido prestigio y experiencia mínima de diez años de ejercicio profesional en el ámbito sanitario”. Este mandatario será nombrado por el Consejo de Ministros “a propuesta del Ministerio de Sanidad” y “previa comparecencia” del mismo ante el Congreso de los Diputados “con el fin de que examine si la experiencia, formación y capacidad son adecuadas para el cargo”.

“El Congreso, a través de la Comisión competente y por acuerdo adoptado por mayoría absoluta, aceptará la propuesta -añade el texto-. Si transcurridos 15 días desde la comparecencia no hubiera aceptación, será suficiente la mayoría simple de la Comisión competente del Senado para manifestar la aceptación”.

Dicho presidente permanecería en el cargo seis años no renovables y solo cesaría antes a petición propia, por estar incurso en alguna causa de incompatibilidad, por incapacidad sobrevenida para el ejercicio de sus funciones, por incumplimiento grave de sus obligaciones o por condena por delito doloso.

Enmiendas 'tecnicas' de Vox

Por su parte, la formación liderada por Sanitago Abascal propone que el Proyecto de Ley para la Agencia Estatal de Salud Pública recoja que entre los retos a los que se debe enfrentar el sistema público de salud de España se tenga en cuenta los "derivados de la relación con los animales", además de aquellos de índole demográfica, solcial, tecnologíca, ambiantal y económica, que ya aparecen recogidos en el articulado. 

Junto a esto, Vox elimina del texto la propuesta de involucrar a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA); la Organización Mundial de la Salud (OMS); la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) en el trabajo conjunto para integrar el enfoque "una sola salud" que propone el Proyecto de Ley.

En cambio, plantea que sea la Agencia Estatal de Salud Pública quien centre sus enfuerzos en crear un enfoque "centrado en la persona que reconozca que la salud humana y la salud animal son interdependientes y están vinculadas a los ecosistemas en los que coexisten". 

Al mismo tiempo, la formación de extrema derecha suprime del cuerpo de esta proposición que los retos de salud pública vayan "en conexión con los Objetivos de Desarrollo Sostenible".