Sanidad ultima la armonización nacional de la vigilancia de salud ambiental

El Ministerio de Sanidad ha sometido a consulta pública el real decreto para la regulación del Sistema de Vigilancia de Sanidad Ambiental, con el que se pretende potenciar y armonizar el funcionamiento de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave) a la hora de prevenir amenazas de salud como la que supuso el Covid-19.

En el proyecto de RD sobre el Sistema de Vigilancia de Sanidad Ambiental, el Ministerio que dirige Mónica García establece tres objetivos prioritarios en esta materia. El primero de ellos se refiere a la necesidad de regular el funcionamiento de esta herramienta “definiendo los factores y enfermedades objeto de vigilancia”, entre los que se encuentran los contaminantes químicos, los vectores transmisores de patologías y eventos extremos debidos al cambio climático.

De forma paralela, Sanidad busca especificar el impacto de estos factores ambientales en la salud y reforzar la recogida y tratamiento de datos. Y, por último, establecer un marco normativo “acorde a los otros sistemas de vigilancia” regionales que permita “desenvolver la vigilancia de la sanidad ambiental en España en los próximos años, aportando información en la Red de Vigilancia en Salud Pública coordinada por el Ministerio de Sanidad y gestionada conjuntamente con las comunidades autónomas”.

El plan de Sanidad está orientado, en esta línea, a “armonizar” el desarrollo del Sistema de Vigilancia de los riesgos ambientales “tanto entre las comunidades autónomas y ciudades con Estatuto de Autonomía como a nivel internacional”.

Directrices europeas contra factores ambientales peligrosos

Este real decreto hereda el espíritu del Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente (Pesma) aprobado en noviembre de 2021, que establece las actuaciones que han de realizarse para reducir el impacto sobre la salud de los principales factores ambientales y sus determinantes. Según Sanidad, este fue el primer ejemplo de una estrategia integral “abordada desde la salud y el medio ambiente” con una “información normalizada” que permite conocer la evolución de las actuaciones que se llevan a cabo.

En este sentido, añade que las políticas seguidas en la Unión Europea en materia del uso de sustancias como biocidas y fitosanitarios, entre otros, “requieren el seguimiento del impacto de las mismas tanto en el medioambiente como en la salud humana”.

Estructura y funcionamiento de la Renave

“Esta norma con rango de real decreto surge de la necesidad de completar más allá de las enfermedades transmisibles, la configuración y el funcionamiento del Sistema de Vigilancia llevado a cabo hasta el momento por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave), adecuando su estructura y funcionamiento para su integración junto con otros sistemas de vigilancia en salud pública, en la Red Estatal de Vigilancia en Salud Pública”, recalca el área de García.

Con ello, añade, “además de dar cumplimiento a la legislación vigente se adecúa a los retos actuales y futuros de la vigilancia de enfermedades vinculadas factores ambientales y al nuevo contexto social y epidemiológico”.