El fin de las guardias médicas 24h exige un plan específico por Servicio

El acuerdo que ha firmado Pedro Sánchez y Yolanda Díaz para asentar las bases de un posible gobierno de coalición progresista pone sobre la mesa diversas propuestas de materia sanitaria. Una de ellas, tal como ha adelantado Redacción Médica, es la eliminación de las guardias médica de 24 horas, una medida que, desde diversos sectores, tildan de "papel mojado".

Tomás Cobo, presidente de la Organización Colegial Médica (OMC), comenta a este periódico que "hay muchas normas" pero que vivimos una "crisis de implementación" y que hasta que esta no se resuelva no se puede avanzar. Además, apela a la falta de presupuesto. "Para que esto se haga realidad necesitamos dinero, y seguimos con un Producto Interior Bruto (PIB) muy por debajo en sanidad", asegura Cobo.

Una idea que refuerza Tomás Toranzo, presidente de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), que explica en este medio que "sin un PIB de, al menos, 7,5 puntos, no se pueden hacer frente a los problemas del Sistema Nacional de Salud (SNS)". De esta manera comenta que, sin ese aumento del presupuesto, las medidas caen en saco roto.

José Soto, presidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) describe este acuerdo como "papel mojado". En la misma línea que sus compañeros, asegura que los acuerdos pactados por la coalición progresista necesitan presupuesto para poder hacerse realidad. "En el caso de la eliminación de las guardias de 24 horas, se necesitaría más plantilla y, para ello, se debe tener más presupuesto", asegura.

Adaptación de las guardias por especialidades

El presidente de la OMC, además, hace una apreciación sobre la propuesta: las guardias médicas tienen muchas peculiaridades respecto a la especialidad médica y el hospital donde se realicen. "Es impensable pensar que un cirujano cambie de turno a mitad de un procedimiento y deje a otro médico operar al paciente", pone de ejemplo.

De esta manera, el representante de la organización colegial apunta hacia que en algunos Servicios en una guardia "hay una actividad asistencial moderada, y otros en los que es insoportable". "Al final lo importante es que el médico que está en el ámbito asistencial tenga plena capacidad física y psíquica; es la clave", asegura Cobo. Así, comenta que, según el nivel asistencial de cada centro, y de cada especialidad, hay que ver cómo adaptar el sistema.

Posible ley de listas de espera

Otra de las propuestas de los partidos, esta reflejada de manera clara en el documento presentado, es el establecimiento, por ley, de tiempos máximos de espera dentro del SNS. La propuesta de los partidos progresistas es pautar, por ley, un máximo de espera de 120 días para para intervenciones quirúrgicas, 60 días para consultas externas especializadas y 30 días para pruebas complementarias, con independencia del lugar de residencia.

En este caso, los representantes de la OMC, Sedisa y CESM vuelven a encontrarse en la misma línea: se necesita más presupuesto. Por ejemplo, Cobo comenta que "hay tener más recursos y profesionales que puedan ser capaces de reducir los tiempos de espera" y reitera que "está muy bien poner límites, siempre que se puedan cumplir". El médico enfatiza que toda medida para reforzar el SNS "es positiva" pero debe ser discutida y homogeneizada en todo el territorio, para lo que, señala, debe haber un consenso dentro del Consejo Interterritorial.

Ahondando más en las propuestas de la coalición, una de ellas es el aumento de plazas MIR y EIR. Cobo comenta que "es buena idea" pero que, de nuevo, se enfrentan a una falta de recursos. "Necesitamos más unidades docentes. Hay que ver cuántas hay por comunidad autónoma y ver las necesidades; ese dinero sale de los presupuestos autonómicos", indica.

Resolver lo antiguo antes de legislar lo nuevo

"En general, son todo buenas ideas, pero se necesitan resolver otros problemas antes", resume el presidente, que también pone en valor algunas medidas sanitarias de la última legislatura. "Se han hecho cosas buenas, como el Real Decreto de la estabilidad de empleo, el de las nuevas especialidades, o la creación de la Agencia de Salud Pública, aunque esto último ha quedado en un anuncio", detalla Tomás Cobo.

"Que se tomen este tipo de medidas, en general, es positivo, pero tienen que ser armonizadas y contar con los recursos necesarios para llevarlas a cabo", resume.