María Dolores Rubio, directora médico del Hospital Dr. R. Lafora.
La seriedad del método científico aplicada a la dirección sanitaria. La directora médico del
Hospital Dr. R. Lafora,
María Dolores Rubio, está convencida de la importancia de apostar por una “gestión clínica basada en la evidencia”, siendo un pilar fundamental la evaluación de los procesos para determinar las estrategias a perseguir, así como indicar cuáles unidades asistenciales seguirán igual, se modificarán o, finalmente, tendrán que ser cerradas para dar paso a un servicio que se puede ofrecer en el domicilio o por dispositivos médicos a distancia. Un proceso fundamental, ya que sus resultados “se verán en los próximos 20 años”.
María Dolores Rubio explica la importancia de la evaluación en la gestión clínica.
|
Los grandes aliados serán los mecanismos de medición y las nuevas tecnologías, ambas consideradas herramientas fundamentales de los gestores sanitarios por Rubio, quien ha destacado su potencial para, entre otros aspectos, ayudar a la eliminación de las “posibles bolsas de ineficiencia que afectan al 30 por ciento de los presupuestos”. Sin embargo, no todo está en las cifras y pone de relieve la necesidad de que pacientes y familiares participen de forma activa en todo el proceso de tomas de decisiones. Eso sí, siempre con los datos en mano.
¿Cómo ha sido el primer año frente al Hospital Dr. R. Lafora?
Creo que positivo. Está siendo una experiencia que me ha aportado mucho desde el punto de vista de ampliación de conocimientos y conocer mejor el campo de la Salud Mental, pero en la que aún queda mucho por recorrer. Es muy importante que empecemos a determinar los conceptos para favorecer la lucha contra el estigma de la enfermedad, así como potenciar la investigación. La tecnología jugará un papel fundamental, ya que, como se ha visto, incluso se está empleando la realidad virtual en la lucha contra las fobias, con resultados muy positivos.
¿Cuáles serán los retos que ha tenido que asumir con su llegada a la gestión del centro?
Uno de los primeros ha sido la apertura de nuevas unidades. Estamos viendo que hay una prevalencia de las enfermedades mentales, haciendo difícil que sean cubiertas. Por eso, y con el apoyo de la Comunidad de Madrid, estamos apostando por implementar unidades específicas. No toda la asistencia en Salud Mental requiere de los mismos recursos, por lo que debemos intentar que cada paciente cuente con los recursos necesarios según sus propias necesidades.
¿Cuál es una de las unidades más importantes en las que están trabajando?
La Unidad de Trastornos de la Personalidad. El objetivo que hemos previsto es que los profesionales participen en las tomas de decisiones, haciendo que la gestión sea cada vez más participativa. Por eso hay que intentar mirar a modelos de liderazgo compartido y dejar que la estrategia sea diseñada por sanitarios, gestores, pacientes y sus familiares, lo que permitirá que todos rememos en el mismo sentido.
¿Cuáles son los esfuerzos realizados para incorporar la humanización al centro?
El Plan de Humanización en la Comunidad de Madrid es pionero. Cuenta con líneas estratégicas muy definidas, pero muy amplias. Por tanto, desde el área de Salud Mental, consideramos que somos un sector fundamental para el espacio sociosanitario y todos los planes que se elaborarán a futuro, una línea que estamos trabajando conjuntamente con la Consejería de Sanidad. En nuestro caso particular, la mejor humanización es que el paciente tenga todos los recursos que necesita según su caso particular.
María Dolores Rubio, directora médico del Hospital Dr. R. Lafora.
|
Algunos consideran la humanización una excusa para tapar los recortes…
Quiero dejar claro el punto de los llamados recortes: no me consta que hayan existido, aunque sí se ha percibido un mayor peso sobre los profesionales sanitarios, quienes han hecho un esfuerzo importante en la planificación diaria de los hospitales. En ninguno de los hospitales de Madrid se ha quedado una persona sin operar o ser atendido. Aunque sí es cierto que, así como en cualquier otro sistema sanitario, existen posibles mejoras estructurales.
De ahí que sea tan importante cuidar los recursos. Como dice la presidenta Cristina Cifuentes, si se destina presupuesto a un proyecto tendrá que eliminar se otro, por lo que la opinión de los ciudadanos es fundamental para trazar las estrategias sanitarias. Una de esas puestas ha sido el Plan de Humanización, aunque bien se pudo llamar el Plan de la Medicina Personalizada.
¿Qué aspectos de la gestión serán claves para optimizar los recursos de los centros?
La evaluación es fundamental, aunque es una asignatura pendiente que tenemos. Por años se ha hablado de la Medicina basada en la evidencia, pero ahora es momento de que comencemos a hablar de la gestión basada en la evidencia, siendo fundamental que se apueste por la evaluación para lograrlo.
En nuestro país tenemos una red de agencias de evaluación integradas, siendo una herramienta para los gestores para que en la toma de decisiones sepamos qué resultados se están teniendo, si son positivos o bien tenemos que introducir modificaciones en nuestras decisiones. Al final, hay un montón de datos que hay que empezar a tratar y a analizar.
¿Cuándo considera que se pueden medir los efectos de las medidas tomadas en la actualidad?
Estamos ante una aparición y evolución muy rápida de las nuevas tecnologías, lo que nos obliga a diseñar un plan de cómo queremos que esas nuevas tecnologías entren en nuestro sistema sanitario, siendo uno de los grandes retos de la gestión clínica, junto con la continuidad asistencial. En esta toma de decisiones debemos tener en cuenta que afectarán a futuro y que los errores que podamos cometer actualmente podrán quedar en evidencia dentro de 20 años.
Por lo tanto, estamos en un momento realmente muy interesante de retos, tomas de decisiones y necesidad de pacto. Hay que buscar el encuentro para la sanidad, de forma de que podamos diseñar el futuro del sistema sanitario y garantizar su sostenibilidad.
La directora médico del Hospital Dr. R. Lafora.
|
¿Qué otros aspectos son fundamentales tener en consideración?
Estamos involucrados en la llamada Sanidad ‘4P’, donde se valora la prevención, siendo fundamental en área como la Salud Mental; predicción, logrando adelantarnos incluso con la predisposición genética; participación, de los pacientes en el modelo sanitario; y la personalización, dando cada vez más una atención a la medida y donde entran todos los esfuerzos de la humanización. Todas son áreas fundamentales a tomar en cuenta en la gestión.
¿Qué aspectos fomentan la creación de Unidades de Gestión Clínica?
Las Unidades de Gestión pueden estar para dar respuesta a la cronicidad. La experiencia está empezando a mostrar que las unidades monográficas ayudan en aquellas áreas de enfermedades más complejas y donde intervienen muchos profesionales, siendo necesario un abordaje más moderno que el actual. Esto evitaría que el paciente esté dando vueltas por el sistema sanitario y, quizá, ocasionando una mayor demanda que ralentiza los tiempos de espera.
Hay que considerar que tenemos más de 250.000 consultas diarias en el sistema madrileño de salud, por tanto, gestionar ese número de citas es muy complicado. Sin embargo, al crear este tipo de unidades se facilita su gestión.
¿Tienen prevista la incorporación de estas unidades en su centro?
De momento, no. Estamos en una fase de reorganización de todas las unidades asistenciales y ver con qué recursos contamos para cada uno de nuestros pacientes. Hay que recordar que tenemos a personas que, por ejemplo, entraron con una enfermedad mental grave cuando tenía 60 años y ahora, con 65, sigue en el centro pero ya no con el problema principal, sino con aquellos generados por el propio envejecimiento. De ahí que sea importante medir si aún requiere de tratamiento o si por el contrario estaría mejor en una residencia.
¿Considera acertada la apuesta por la profesionalización de la gestión sanitaria?
Hay que caminar, efectivamente, hacia la profesionalización de la gestión. Un gestor no solamente debe tener conocimientos básicos, sino que debe conocer la organización, la legislación vigente, la Ley de Contratos Públicos, la directiva europea, así como tener un amplio dominio de las políticas de recursos humanos. A esto hay que sumar otro aspecto que es fundamental: la capacidad de liderazgo. Es un valor que hay que valorar dentro de la gestión, ya que el gestor no podrá ir solo, sino que tendrá que dar participación a todos los profesionales.
¿El diploma de acreditación para directivos de la sanidad es la mejor solución?
La acreditación es fundamental en términos de funcionamiento de cualquier empresa o unidad. Por supuesto, hay que caminar hacia la acreditación de los servicios que prestamos, ya que es un concepto de calidad. Evidentemente tenemos que caminar hacia la acreditación de los profesionales y, entre ellos, entran también, por supuesto, los gestores. Es la única garantía de calidad y la transparencia dentro del sector.
María Dolores Rubio durante la entrevista en Redacción Médica.
|
¿Cuáles son los objetivos que buscará alcanzar al frente del centro como directora?
Estamos consiguiendo colocar a los pacientes en cada uno de los procesos. Creemos que es fundamental que ellos, y sus familiares, participen de forma activa. Es un logro que ya estamos consiguiendo y que nos ayudará a adaptar al hospital al futuro: un nuevo abordaje de la Salud Mental. La comunidad de Madrid ha mostrado su interés en colaborar con esta área, permitiendo que, así como ocurrió con el Plan de Humanización, sea pionera en el Plan Estratégico de Salud Mental.
¿El gran reto de la gestión clínica para los próximos años?
Que tengamos resultados en salud, ver que lo invertido ha servido de algo. Actualmente, un 30 por ciento de los presupuestos tienen bolsas que llamamos de ineficacia y que son mejorables. Si bien es cierto que durante la crisis hemos aprendido a gestionar más y mejor, aún quedan margen de mejora, aunque hemos ido limando y buscando las bolsas de ineficiencia para optimizar los resultados. Para lograrlo, estamos invirtiendo en muchas tecnologías que nos permitirán conocer las muertes que hemos evitado, la caída de la cronicidad y otros de los aspectos claves.
A lo mejor estamos realizando determinados procedimientos que no tienen al final resultados en salud. Entonces, para el gestor eso es primordial para saber qué políticas dentro del hospital o qué procedimientos debe implementar y cuáles debe quitar de la cartera de servicios, porque no tienen al final ninguna utilidad, ninguna eficacia.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.