Redacción. Barcelona
La figura del farmacéutico en los laboratorios de análisis clínicos ha ido cambiando a lo largo de la historia. Para analizar el papel que puede ejercer este profesional en la actualidad, el desarrollo de las especialidades del laboratorio clínico y la repercusión que puede tener el proyecto de troncalidad en su futuro, varios farmacéuticos especialistas en la materia se han reunido en la mesa sobre “La relación entre los profesión farmacéutica y el laboratorio de análisis clínicos”. Este debate se ha celebrado en el marco del Congreso Europeo de Farmacia, Infarma 2013, que tiene lugar en Barcelona hasta mañana.
Integrantes de la mesa sobre los laboratorios de análisis clínicos. |
Marta García, jefe del servicio de Bioquímica Clínica Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, vocal de Análisis Clínicos del COF de Madrid y Vocal Nacional de Análisis Clínicos del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos de España, ha explicado durante su intervención el nuevo proyecto de diciembre de 2012 del Real Decreto sobre la Troncalidad. “Este nuevo proyecto regula la incorporación de criterios de troncalidad en la formación de determinadas especialidades de Ciencias de la Salud, así como los procedimientos para la obtención del título de especialista. El objetivo es la flexibilización del catálogo de especialidades en Ciencias de la Salud para adecuarse a la necesidad social de equipos pluridisciplinares”.
Entre los elementos positivos que ha destacado la ponente sobre el futuro Real Decreto se encuentran “la unificación de criterios, el nivel de flexibilidad, una mayor eficiencia al compartir recursos tecnológicos y de personal y la adecuación de los recursos humanos a las necesidades del Sistema Nacional de Salud. El proyecto de troncalidad es beneficioso, permitirá al profesional sanitario tener una visión completa para luego especializarse”. Aunque también ha resaltado, entre otras consideraciones, “la necesidad de la formación integral para las cinco licenciaturas sobre las que se aplica: farmacia, medicina, química, bioquímica y biología”.
Por su parte, Mercedes Gras, abogada y jefa del departamento de Asesoría Jurídica del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona, ha repasado los cambios legislativos que ha sufrido el farmacéutico en relación a los análisis clínicos: “Hasta 1982, un licenciado en farmacia podía hacer análisis clínicos en la oficina de farmacia, en ese año la legislación cambia y se crea la especialidad de análisis clínicos. En la actualidad la oficina de farmacia se ha convertido en un centro de extracción de muestras. Este tipo de centros deben estar siempre vinculados a un laboratorio, y además, el farmacéutico debe anunciar con cuál trabaja. Los centros de extracción de muestras no están del todo regulados”.
“Son muy pocos los análisis justificados sin prescripción médica que pueden realizar los farmacéuticos: el de glucosa, colesterol y coriogonadotropina”, explica Xavier Fuentes, consultor en Ciencias de Laboratorio Clínico Barcelona, sobre el papel actual que puede ejercer el farmacéutico en materia de análisis clínicos. “Actualmente las farmacias no pueden contener un laboratorio de análisis clínico, a no ser que esté específicamente autorizado, pero el farmacéutico sigue teniendo una función importante como asesor para el paciente en la idoneidad de los análisis, la variabilidad extra analítica, la interpretación de los intervalos de referencia o en la variedad metrológica”, concluye.