Entrar a Medicina tras una FP y 4 EBAU: "Es una carrera muy agradecida"

Hay experiencias en la vida que nos marcan y ‘diseñan’ nuestra forma de ver el mundo. En el caso de Rodrigo López hay dos momentos claros que incentivaron su vocación por la Medicina y que le ‘empujaron’ a querer convertirse en médico: cuando a su abuela le diagnosticaron problemas en el corazón, y el momento en el que se enteró de que su padre tenía cáncer. Con el objetivo en mente de querer salvar a pacientes con patologías como las de sus familiares, puso rumbo a conseguir lo que tanto ansiaba: entrar en Medicina. Aunque no lo hizo de primeras. Y es que este actual estudiante de tercero se graduó previamente de una FP sanitaria y se presentó 4 veces a la EBAU para lograr alcanzar su sueño. “Siempre me he mantenido enfocado”, ha reconocido.

Cuando López tenía ocho años y a su abuela le diagnosticaron problemas en el corazón, veía lo “mal” que estaba y se preguntaba si iba a fallecer. Él quería ayudarla, pero no sabía cómo hacerlo debido a su corta edad. Y fue en ese preciso momento cuando se encendió esa primera ‘chispa’ que acabaría llevándole a querer formarse como facultativo. Años más tarde y durante el Bachillerato, a su padre le localizaron un cáncer y lo que era solo una opción acabó siendo su camino. “Fue la gota que colmó el vaso”, ha afirmado a Redacción Médica. 

Con el objetivo claro de querer entrar en Medicina, se presentó a la EBAU, pero sus notas no eran lo suficientemente buenas y no se esforzó “demasiado” en los tres primeros intentos. Un “error” del que ahora se arrepiente, aunque era consciente de que había otras opciones para entrar a Medicina y él “siempre” confió en el proceso.

Hacer Enfermería o Fisioterapia antes que Medicina

A pesar de ahora mostrarse seguro con su decisión, no siempre ha sido así. De hecho, cuando vio que sus calificaciones no eran lo suficientemente buenas se planteó hacer Fisioterapia o Enfermería porque las veía como opciones “más asequibles” dentro del sector de la salud. Pero esas ideas la descartó rápidamente porque, reflexionando, sabía que eso no era lo que quería.

Así que, con la convicción de entrar a Medicina, costase lo que costase, este futuro médico cursó una FP sanitaria para, posteriormente, dar ese salto a la universidad. “La última selectividad a la que me presenté me esforcé muchísimo y lo conseguí”, ha detallado.

Medicina, una carrera "complicada pero agradecida"

Durante estos tres años en la universidad hay aspectos que le han sorprendido y, entre ellos, el que más le ha llamado la atención es comprobar que la Medicina es una carrera complicada “pero agradecida”. “Si tú estudias lo suficiente acabas aprobando”, ha indicado.

En cambio, uno de los experiencias que más le ha disgustado durante su formación ha sido los sacrificios que ha tenido que hacer durante las épocas de exámenes. “A mí me afecta con el tema deporte. Habrá compañeros que encuentren el equilibrio, pero yo tengo que evitar hacer muchas cosas durante ese mes y medio que necesito para prepararlos”, ha resaltado.

¿Hay competitividad en Medicina?

Sobre la competitividad en Medicina López reconoce que ha escuchado que existe, pero en su caso no lo ha notado. “La gente con la que me rodeo siempre me ayuda en todo lo que necesito, y en mi círculo no hay competencia. También puede ser porque yo soy un poco independiente y voy a mi bola. Quizás no me entero”, ha detallado entre risas.

Para concluir, López ha querido mandar un mensaje a todos aquellos aspirantes a la carrera que se encuentran en una situación parecida a la que él estuvo hace algunos años. En este sentido, les ha alentado a que sigan intentando cumplir su sueño sin desesperarse porque hay “muchas vías” distintas para entrar a la universidad. “Si entráis más tarde no os preocupéis. Aquí hay gente de todas las edades y, al final, lo importante es disfrutar de esto”, ha concluido.