La ministra portavoz, Isabel Rodríguez.
El Consejo de Ministros ha aprobado los
Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año 2023 que contemplan un importante incremento de la partida de sanidad. La política sanitaria contará con
5.511 millones de euros en el próximo ejercicio, lo que supone un 6,7% más que en el curso pasado. Esta subida permitirá acometer nuevas inversiones en infraestructuras que se centrarán fundamentalmente en la Atención Primaria y la Salud Mental. Así como aumentar en
1.000 las plazas de Medicina en el conjunto de las universidades que recibirán 50 millones adicionales para materializarlo.
Las nuevas cuentas aprobadas por el Gobierno de coalición han incorporado un gasto adicional de
500 millones de euros que permitirán impulsar infraestructuras clave para los dos sectores sanitarios que han copado buena parte de la negociación entre el Partido Socialista y Unidas Podemos. Mietras que un total de
172 millones permitirán reforzar específicamente los servicios de Atención Primaria.
El gasto financiero también servirá para subir el volumen de futuros médicos en el sistema educativo, después de que el Ministerio de Universidades se haya comprometido a
aumentar las plazas en un 15 por ciento. “Podemos seguir incrementando el número de alumnos de Medicina y disminuyendo el ‘número clausus’ que para muchos jóvenes les impide acceder a su vocación”, ha relatado la ministra de Hacienda,
María Jesús Montero, en la rueda de prensa de presentación de los PGE.
Además del incremento en gasto sanitario, las cuentas también reflejan avances en otros sectores vinculados con la sanidad. La inversión en
Ciencia también ha crecido en un 23 por ciento en comparación con el año pasado, lo que supondrá un balance total de
8.673 millones de euros para mejorar los proyectos en marcha de I+D+i. Esta estrategia va en la línea de la apuesta del Gobierno por situar al sector en el 1,25 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).
También se ha reforzado la partida destinada a la
Dependencia, donde prestan sus servicios con frecuencia enfermeros o fisioterapeutas. El área que dirige la portavoz de Unidas Podemos, Ione Belarra, contará con 620 millones adicionales hasta los
3.522 en
el próximo curso y se situará en su “máximo histórico”.
Inversión pública para mejorar el sueldo de los funcionarios
Otra de las claves de gasto de los Presupuestos Generales de 2023 es que el Ejecutivo ha inflado la partida dirigida a cubrir los sueldos de los funcionarios públicos, incluidos médicos y enfermeros, tras
el reciente acuerdo alcanzado con la mayoría de los sindicatos. La nueva partida ya incorpora la inyección necesaria para que los salarios crezcan en el orden de un 2,5 por ciento el año que viene, mientras que también contempla otro 1 por ciento vinculado a variables como la inflación y la evolución de la economía.
“Es importante
destacar la responsabilidad de las organizaciones sindicales, en concreto CCOO y UGT, que nuevamente han llegado a un acuerdo para las retribuciones de los empleados públicos”, ha enfatizado Montero, que ha eludido al sindicato CSIF que no firmó el acuerdo sellado en la tarde del lunes.
Los PGE aprobados por el Gobierno contemplan con todas estas cuestiones
un gasto social de 266.719 millones de euros, el más elevado de toda su historia. Unos datos que se asientan en las previsiones de recaudación fiscal con las últimas reformas aplicadas y en la proyección económica. El Ministerio de Economía espera que el Producto Interior Bruto (PIB) se eleve un
4,4 por ciento este año y un 2,1 por ciento en el siguiente.
En todo caso, el texto pactado por el Partido Socialista y Unidas Podemos tendrá que pasar por el Congreso de los Diputados, donde se espera un intenso debate con los socios habituales de la legislatura para cerrar la mayoría.
Esquerra Republicana ya ha vinculado su apoyo a algunas políticas en materia de Vivienda. La negociación se prolongará durante varias semanas.
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