El metaverso, una herramienta diagnóstica en Dermatología a 5 años vista

El gran auge de la telemedicina llegó con la pandemia y ahora se resiste a abandonarnos. Y eso es una buena noticia, ya que se pueden buscar nuevas maneras de atender a los pacientes sin la necesidad de la presencialidad, pero dándoles el seguimiento que necesitan. El último avance de internet ha llegado de la mano del metaverso, que según confían los especialistas, se convertirá en una herramienta diagnóstica en Dermatología en cuatro o cinco años.

El concepto de 'dermaverso' es un juego de palabras que une la Dermatología y el metaverso. “El metaverso no significa ni más ni menos que el mundo digital, no es nada especial ni revolucionario”, explica a Redacción Médica, Julián Conejo-Mir, catedrático y jefe de Servicio de Dermatología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Este especialista también participa en investigaciones relacionadas con nuevas tecnologías y diagnóstico en Dermatología.

“El metaverso para nosotros va a ser fundamental porque trabajamos con imágenes. Va a ser importante tanto en el diagnóstico como en el seguimiento”, comenta Conejo-Mir. “Además podremos ver y hacer seguimientos de los pacientes desde su casa, sin que el paciente se desplace”, indica. Pasar consulta como si el médico estuviera en casa del mediente "va a llegar con la realidad aumentada". "A esta mezcla de realidad virtual y aumenta en la que ves al paciente cara a cara todavía le quedan unos 15 años, por lo menos. Pero para tenerlo como herramienta de diagnóstico en el día a día en unos 4 o 5 años lo empezaremos a ver". Sobre todo en los casos en los que el paciente envía su consulta con imágenes a través del metaverso y el médico le responde con un diagnóstico y tratamiento.

El metaverso que trata de crear Mark Zuckerberg  “no es un juego”, señaló Miriam Fernández Parrado, dermatóloga en el Hospital Universitario de Navarra, durante el congreso de Dermatología 'Skin & Digital Summit' de IMCASS Academy del pasado 10 de diciembre. Esta especialista ha visto el potencial que tiene para su campo el metaverso y ha publicado un artículo al respecto: A new universe in Dermatology: From metaverse to Dermoverse.

“Es difícil definirlo. Puede considerarse el siguiente nivel de Internet: un mundo entero en el que seremos capaces de interactuar con otros usuarios a través de avatares y vivir experiencias, como ir a conciertos, espectáculos de humor y, ¿por qué no? Ir al médico”, comentó sobre el uso del metaverso dentro de la Dermatología hace unos meses.

El metaverso puede ser un lugar “adecuado” en el que pacientes y médico “puedan hablar sin interrupciones”, pero además, es una opción para “los pacientes que no puedan acudir a consulta porque viven lejos”, indica la dermatóloga. Por otra parte, también puede mejorar “el seguimiento de pacientes crónicos”, que muchas veces por “ las largas listas de espera” no pueden acudir a consulta tantas veces como sería deseable.

El uso del metaverso también puede ser muy interesante para “consultas presenciales pediátricas”, comenta Fernández. Esto se debe a que el ambiente envolvente puede ayudar a los niños a relajarse y centrarse en otras vivencias, mientras el dermatólogo les examina o hace biopsias, curetajes o crioterapia. De hecho, ya se ha probado con niños mientras les vacunan. En este caso, un dragón les explica el procedimiento y después les dice que van a recibir el poder de los dragones mientras les pinchan. “Los niños terminan sonriendo”, afirma Fernández.

“En el Hospital de Navarra han publicado un artículo en el que han probado la realidad aumentada en niños mientras les sacan sangre. Los niños están en un mundo virtual y se ha visto que reduce el dolor y la incomodidad”, explica Héctor Perandones, adjunto de Dermatología en el Complejo Hospitalario de León y autor senior del artículo sobre el dermaverso. “Esto se puede usar en Dermatología en procesos que son dolorosos para abstraer la mente del paciente”, añade.  

Otra opción que puede ofrecer el dermaverso, es que los pacientes con dermatitis de contacto puedan escanear los productos que van a comprar y se les alerta si puede contener algún alérgeno que pueda desencadenar un brote.

Pero no solo los pacientes se pueden ver beneficiados por el uso del dermaverso, también los propios médicos, sobre todo cuando están aprendiendo (pero no solo durante esa etapa), ya que pueden aprender anatomía debido a las opciones que ofrecerá la evolución de internet. Desde aprender lo más básico del cuerpo humano hasta ver tumores y cómo deberían operarse, esto ayudaría a muchos médicos a prepararse para su práctica diaria. “Se podría hacer un gemelo virtual, que es un modelo del paciente. Esto en el campo quirúrgico es muy interesante porque podrías probar virtualmente con realidad aumentada los tratamientos quirúrgicos o diseño de colgajos en el paciente y ver cuál es el resultado, para elegir la mejor opción”, comenta el coautor de este artículo.

Además, Perandones señala que también va a cambiar la manera en la que se realicen los webinars: “Llegará un momento en el que se harán con realidad aumentada y cada uno tendrá su avatar, de esta forma la interacción cambiará”.

No obstante, el dermaverso, al igual que el metaverso, no están exentos de posibles problemas, tal y como advierten los especialistas. Uno de ellos, por ejemplo, serán los hackers. Pero también la manera en la que se protejan los datos de los pacientes, ya que es necesario que se mantenga la confidencialidad sobre la salud de los que visiten a los médicos a través de internet. Una opción, explica a Redacción Médica Perandones, sería “vincularlos a los Non-Fungible Tokens o NFT, para que los pacientes sean dueños de su propia información sin que haya intermediarios”, añade. “También tiene sus inconvenientes, porque el paciente tiene su información; pero se puede perder… Si está cualificada en un NFT es un valor único irreproducible y sería una posible solución”, concluye.