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Una vez que se ha decidido firmemente trabajar como farmacéutico en el extranjero ya no hay vuelta atrás. Ejercer esta profesión en otro país que no sea España puede garantizar sueldos más altos y condiciones laborales estables, sin embargo, hay que tener en cuenta una serie de aspectos y requisitos para lograr obtener un buen puesto.
El idioma siempre va a ser un requisito indispensable, ya sea para trabajar como farmacéutico u otra profesión sanitaria. Sin embargo, la necesidad de otros países de médicos y enfermeros no es la misma que con esta carrera, por lo que será habitual encontrar ofertas de trabajo que marcan como requisito contar con un buen nivel del idioma oficial del país, entre un nivel B2-C1.
A su vez, en aquellos países donde la lengua oficial no sea el inglés, es probable que también sea necesario hablar las dos lenguas -inglés y el idioma oficial del destino-. Lo habitual es solicitar un nivel C1 de inglés. No obstante, siempre dependerá de las condiciones exigidas en cada oportunidad laboral. Por ejemplo, en esta oferta de empleo publicada en el SEPE para trabajar como farmacéutico en Alemania solo se solicita un nivel B1 de alemán.
Para ejercer la profesión farmacéutica fuera de España, también se requiere contar con el título de graduado o licenciado en Farmacia expedidos en los Estados Miembros de la Unión Europea o signatarios del acuerdo sobre el Espacio Económico Europeo y Suiza. Además, como ocurre en nuestro país, es habitual que se requiera estar colegiado en un Colegio Oficial de Farmacéuticos, en este caso, que corresponda con el país de destino.
Para trabajar en un país de la Unión Europea, según detallan desde el Consejo General de Colegios Farmacéuticos, "los Licenciados o Graduados en Farmacia deberán solicitar la acreditación de su título como trámite imprescindible para solicitar y obtener del Estado miembro en el que pretendan desarrollar la actividad el reconocimiento profesional". Regulado por el Real Decreto 1837/2008, por el que se incorpora al ordenamiento jurídico español la Directiva 2005/36/CE y la Directiva 2006/100/CE, de 20 de noviembre, esta acreditación es un requisito imprescindible que será realizada por el Ministerio de Educación donde se puede consultar la documentación necesaria.
A su vez, desde la organización se detalla que "si se ha estado colegiado en España se aportará certificado de colegiación donde se indique que durante el período de colegiación no ha sido suspendido, inhabilitado ni se le ha prohibido el ejercicio de la profesión en España. El certificado tendrá una validez de tres meses".
Además de los requisitos generales que se dan para trabajar fuera, cada una de las ofertas detallarán los requisitos indispensables para acceder al puesto ofertado. Es habitual que estos varíen en función de la tipología del puesto: farmacia hospitalaria, farmacia comunitaria, laboratorio, industria...etc. Así, cada uno de estos pedirán al candidato unas habilidades determinadas, contar con más o menos años de experiencia, o incluso poseer algún postgrado específico.
Trabajar como farmacéutico en el extranjero: idioma
El idioma siempre va a ser un requisito indispensable, ya sea para trabajar como farmacéutico u otra profesión sanitaria. Sin embargo, la necesidad de otros países de médicos y enfermeros no es la misma que con esta carrera, por lo que será habitual encontrar ofertas de trabajo que marcan como requisito contar con un buen nivel del idioma oficial del país, entre un nivel B2-C1.
A su vez, en aquellos países donde la lengua oficial no sea el inglés, es probable que también sea necesario hablar las dos lenguas -inglés y el idioma oficial del destino-. Lo habitual es solicitar un nivel C1 de inglés. No obstante, siempre dependerá de las condiciones exigidas en cada oportunidad laboral. Por ejemplo, en esta oferta de empleo publicada en el SEPE para trabajar como farmacéutico en Alemania solo se solicita un nivel B1 de alemán.
Trabajar como farmacéutico en el extranjero: Grado y Colegiación
Para ejercer la profesión farmacéutica fuera de España, también se requiere contar con el título de graduado o licenciado en Farmacia expedidos en los Estados Miembros de la Unión Europea o signatarios del acuerdo sobre el Espacio Económico Europeo y Suiza. Además, como ocurre en nuestro país, es habitual que se requiera estar colegiado en un Colegio Oficial de Farmacéuticos, en este caso, que corresponda con el país de destino.
Trabajar como farmacéutico en el extranjero: Convalidaciones
Para trabajar en un país de la Unión Europea, según detallan desde el Consejo General de Colegios Farmacéuticos, "los Licenciados o Graduados en Farmacia deberán solicitar la acreditación de su título como trámite imprescindible para solicitar y obtener del Estado miembro en el que pretendan desarrollar la actividad el reconocimiento profesional". Regulado por el Real Decreto 1837/2008, por el que se incorpora al ordenamiento jurídico español la Directiva 2005/36/CE y la Directiva 2006/100/CE, de 20 de noviembre, esta acreditación es un requisito imprescindible que será realizada por el Ministerio de Educación donde se puede consultar la documentación necesaria.
A su vez, desde la organización se detalla que "si se ha estado colegiado en España se aportará certificado de colegiación donde se indique que durante el período de colegiación no ha sido suspendido, inhabilitado ni se le ha prohibido el ejercicio de la profesión en España. El certificado tendrá una validez de tres meses".
Condiciones específicas según el puesto de trabajo
Además de los requisitos generales que se dan para trabajar fuera, cada una de las ofertas detallarán los requisitos indispensables para acceder al puesto ofertado. Es habitual que estos varíen en función de la tipología del puesto: farmacia hospitalaria, farmacia comunitaria, laboratorio, industria...etc. Así, cada uno de estos pedirán al candidato unas habilidades determinadas, contar con más o menos años de experiencia, o incluso poseer algún postgrado específico.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.
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