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El aislamiento domiciliario es el que se produce cuando se da positivo en Covid-19 o cuando ha habido contacto estrecho con una persona diagnosticada con Covid. En cambio, el confinamiento domiciliario es el impuesto por las autoridades para evitar la expansión de un virus, en este caso, el SARS-CoV-2. Aún así es importante conocer las cuestiones que implican este aislamiento y confinamiento.
En el caso del aislamiento domiciliario, las personas deben permanecer en sus hogares durante un periodo estimado de 10 días tras haber recibido el diagnostico positivo de Covid-19. Si en el transcurso de la enfermedad se nota un empeoramiento de los síntomas asociados al coronavirus, debe ponerse en contacto con las autoridades sanitarias de su Comunidad Autónoma.
El aislamiento domiciliario también debe ser respetado por las personas que han estado en contacto directo o estrecho con un positivo en Covid-19 de 24 a 48 horas antes de su diagnóstico. Durante esta cuarentena no podrán salir de casa, si se diese la situación de que convive con el positivo en coronavirus debe mantener unas estrictas normas de limpieza e higiene para evitar el contagio.
Sanidad establece una serie de pautas para mantener la seguridad dentro del lugar de aislamiento. Estas son las siguientes:
El confinamiento domiciliario ha sido la medida que se ha tomado en muchos países para frenar el avance de la pandemia de Covid-19. El primer país en instaurarlo fue China que confinó a 22 millones de personas que vivían en la región de Wuhan para tratar de evitar la expansión del coronavirus.
En España, Pedro Sánchez anunció el 14 de marzo de 2020 el confinamiento domiciliario de toda la población para intentar disminuir el ingente número de casos positivos en Covid-19. Una medida que puede afectar a la salud mental de muchas personas. Por ese motivo, desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) han elaborado una serie de recomendaciones y consejos para cuidar la salud mental en momentos de confinamiento. Estas son las siguientes:
En el caso del aislamiento domiciliario, las personas deben permanecer en sus hogares durante un periodo estimado de 10 días tras haber recibido el diagnostico positivo de Covid-19. Si en el transcurso de la enfermedad se nota un empeoramiento de los síntomas asociados al coronavirus, debe ponerse en contacto con las autoridades sanitarias de su Comunidad Autónoma.
Seguridad Covid en el aislamiento domiciliario
El aislamiento domiciliario también debe ser respetado por las personas que han estado en contacto directo o estrecho con un positivo en Covid-19 de 24 a 48 horas antes de su diagnóstico. Durante esta cuarentena no podrán salir de casa, si se diese la situación de que convive con el positivo en coronavirus debe mantener unas estrictas normas de limpieza e higiene para evitar el contagio.
Sanidad establece una serie de pautas para mantener la seguridad dentro del lugar de aislamiento. Estas son las siguientes:
- Quedarse en casa, si convive con más personas evite salir de la habitación, manteniéndola ventilada y con la puerta cerrada.
- Evite las distintas menores de 2 metros con los convivientes.
- Evite las visitas a su domicilio. Si necesita ayuda con las compras, se las pueden dejar en la puerta.
- Utilice su propio baño. Si no comparte, debe desinfectarse antes de cada uso.
- Tenga cerca productos de higiene para las manos.
- Tenga un cubo de basura con pedal para los residuos que genere.
¿Cómo es el confinamiento domiciliario?
El confinamiento domiciliario ha sido la medida que se ha tomado en muchos países para frenar el avance de la pandemia de Covid-19. El primer país en instaurarlo fue China que confinó a 22 millones de personas que vivían en la región de Wuhan para tratar de evitar la expansión del coronavirus.
En España, Pedro Sánchez anunció el 14 de marzo de 2020 el confinamiento domiciliario de toda la población para intentar disminuir el ingente número de casos positivos en Covid-19. Una medida que puede afectar a la salud mental de muchas personas. Por ese motivo, desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) han elaborado una serie de recomendaciones y consejos para cuidar la salud mental en momentos de confinamiento. Estas son las siguientes:
- Reduzca la exposición a noticias. Intente limitar la frecuencia con la que ve, lee o escucha noticias que le causen preocupación o tensión. Infórmese de las últimas noticias a una hora determinada, una o dos veces al día en caso necesario.
- El contacto social es importante. Si sus movimientos se encuentran restringidos, mantenga un contacto regular con las personas próximas por teléfono o internet.
- Evite el alcohol. Limite el consumo de bebidas alcohólicas o evítelas por completo. No empiece a consumir alcohol si nunca lo había hecho. Evite utilizar el alcohol y las drogas para enfrentarse al miedo, la ansiedad, el aburrimiento o el aislamiento social.
- Controle el tiempo que está delante de una pantalla. Sea consciente del tiempo que pasa cada día delante de una pantalla. Asegúrese de descansar cada cierto tiempo de las actividades de pantalla.
- No abuse de los videojuegos. Aunque los videojuegos pueden ser una forma de relajarse, cuando se está en casa mucho tiempo se puede caer en la tentación dedicarles mucho más tiempo del habitual. Asegúrese de mantener un equilibrio adecuado con las actividades sin dispositivos electrónicos.
- Utilice adecuadamente las redes sociales. Emplee sus cuentas en redes sociales para promover mensajes positivos y esperanzadores. Corrija cualquier información errónea que vea.
- Ayude a los demás. Si puede, ofrézcase a ayudar a otros miembros de la comunidad que lo necesiten, por ejemplo, para hacerles la compra.
- Apoye a los sanitarios. Exprese en las redes sociales o en su comunidad su agradecimiento a los profesionales sanitarios de su país y a todas las personas que trabajan para responder al Covid-19.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.
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